Madrid, 17 may.- La paralización del consumo privado, el recorte del gasto público y la caída de la inversión y las exportaciones son las causas de que la economía española haya entrado en recesión tras sumar dos trimestres consecutivos de contracción.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado hoy que el producto interior bruto (PIB) cayó el 0,3 % entre enero y marzo, después de que en el último trimestre de 2011 bajara otras tres décimas.
El Gobierno considera que esta evolución está en consonancia con sus previsiones para el conjunto del año, para el que calculan una caída del 1,7 %, según ha dicho el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre.
Sólo entre enero y marzo la inversión cayó el 2,6 %, las exportaciones retrocedieron el 0,9 %, el gasto de las administraciones públicas bajó el 0,3 % y el consumo de las familias se mantuvo a cero.
Del comportamiento del sector exterior destaca la caída trimestral del 5 % de la exportación de servicios (entre los que se incluye el turismo), así como la disminución del 3,8 % del gasto que los extranjeros hicieron en España, mientras que las exportaciones de bienes repuntaron un 1 %.
Diferente es la evolución interanual, ya que en comparación con un año antes las exportaciones todavía siguen creciendo (2,2 %), aunque han moderado su subida más de tres puntos, mientras que las importaciones acentúan su caída hasta el 7,2 %.
Respecto a la evolución trimestral de la demanda nacional, cabe señalar el deterioro de la inversión, que fue algo más acusado en el caso de los bienes de equipo (3,3 %) que en la construcción (3,1 %).
En comparación interanual la contracción de la inversión llega al 8,2 %, en tanto que el consumo de los hogares cae el 0,6 % y el recorte del consumo público se eleva al 5,2 %.
La destrucción de empleo se acentuó al caer a un ritmo interanual del 3,8 % (medio punto más que en el trimestre precedente), lo que supone una reducción neta de 655.000 puestos de trabajo a tiempo completo en un año que se repartió entre todas las ramas de actividad sin excepción.
La construcción ha perdido más de 310.000 empleos en el último año, los servicios casi 245.000, la industria casi 87.000 y las ramas primarias (agricultura, silvicultura, ganadería y pesca) más de 13.000.
Por el lado de la oferta, se produjeron caídas de actividad trimestrales en la industria manufacturera (0,6 %), la construcción (3,1 %) y los servicios (0,4 %), mientras que en la agricultura y la ganadería la actividad repuntó el 1,9 %.
Dentro del sector servicios sólo avanzaron entre enero y marzo el sector financiero, el comercio, el transporte y la hostelería, y las actividades relacionadas con la información y las comunicaciones.
Para UGT, esta situación económica es consecuencia de la sumisión a las recomendaciones de Europa, de la política de recortes de derechos laborales y de la opacidad de las actuaciones del Ejecutivo.
Por su parte, las Cámaras de Comercio prevén que tanto la actividad económica como el empleo sigan cayendo en los próximos meses a pesar de las reformas emprendidas por el Gobierno. EFECOM
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