El Plan Ceibal cumple cinco años con la meta de lograr una educación a medida

  • El Plan Ceibal, que ha hecho de Uruguay el primer país de América con una computadora por niño en las escuelas, cumplió hoy cinco años con la meta de transformar esa revolución en un nuevo modelo de enseñanza a medida del alumno.

Raúl Cortés

Montevideo, 31 may.- El Plan Ceibal, que ha hecho de Uruguay el primer país de América con una computadora por niño en las escuelas, cumplió hoy cinco años con la meta de transformar esa revolución en un nuevo modelo de enseñanza a medida del alumno.

El presidente José Mujica y su antecesor, Tabaré Vázquez, promotor del proyecto, encabezaron el acto conmemorativo, que tuvo lugar en la Escuela 24 de Villa Cardal, una humilde población a un centenar de kilómetros al noroeste de Montevideo.

Allí comenzó en 2007 el Plan Ceibal, cuyo director, Miguel Brechner, se vanaglorió hoy de haber logrado en un lustro distribuir las ceibalitas (computadoras portátiles) a 570.000 estudiantes de primaria y secundaria de las escuelas públicas del país, de apenas 3,3 millones de habitantes.

Brechner explicó que el 99 por ciento de esos niños tiene internet en su lugar de estudio y un 50 % "no tiene que caminar más de 300 metros para tener señal Ceibal".

Las ceibalitas fueron diseñados por la asociación One Laptop per Children (OLPC, Una Computadora Por Niño) del científico estadounidense Nicholas Negroponte.

El modelo ha despertado el interés de Estados Unidos, Argentina, Colombia y otras naciones de Centroamérica e incluso de Asia, algunas de los cuales lo han replicado.

El plan tiene financiación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el apoyo de empresas como la estatal uruguaya de telefonía Antel o la española Movistar, del grupo Telefónica.

Pese a los logros cosechados, Brechner dijo este jueves que "el desafío mayor todavía está por llegar" y no es otro que "personalizar la educación".

"Nuestro sistema educativo está basado en la revolución industrial, de hace 250 años, (donde) cada grupo tenía una edad e iban todos de forma uniforme a la escuela", recordó.

Actualmente "todos tenemos claro que los niños son diferentes y la única manera que tenemos para diseñar nuestra educación en el siglo XXI es usar la tecnología para que cada estudiante pueda rendir de acuerdo a sus capacidades", adelantó.

Aunque ni Vázquez ni Mujica, ambos del bloque izquierdista Frente Amplio, tomaron la palabra en el acto, al llegar al lugar el exmandatario (2005-2010) destacó a la prensa el "tremendo" potencial de una iniciativa que "tiene muchas aristas positivas"

Entre ellas, "la posibilidad de evaluar en red a todos los niños del país en una sola prueba a través de las computadoras", algo que ya se hace con 180.000 alumnos.

También su "impacto social", porque "en la casa donde llega la computadora, no solo el niño la utiliza, sino también el padre y la madre, que trabajan con ella", recalcó.

En el acto la estudiante de 13 años María Eugenia Fajardo confesó que su "ceibalita" fue la primera computadora que entró en su casa, que la comparte con su madre y que desde entonces casi nunca la apagó.

Otro de los oradores, el presidente del Consejo de Educación Inicial y Primaria, Héctor Florit, recordó que "en el censo del 2006, apenas un tercio de los maestros tenía un manejo aceptable de las computadoras".

Después "miles compraron una 'notebook' subsidiada por el Plan Ceibal" y "decenas se especializaron en desarrollar contenidos", dando lugar a un "nuevo perfil magisterial".

Además, los alumnos son ahora "capaces de encontrar datos, construir informes, procesar encuestas, hacer música o programar", además de producir "cómics o ejercicios de matemáticas", añadió.

Según Brechner, muchos están aprendiendo robótica o a programar en lenguajes como el "scratch", para crear historias interactivas, juegos y animaciones, y compartirlas en la red.

A pesar de su popularidad, el proyecto tiene también algunas sombras, como sus propios responsables revelaron en 2010, cuando una encuesta indicó que un 27,4 % de sus equipos estaba fuera de servicio, un porcentaje que en las escuelas de barrios marginales aumentaba hasta el 33,7.

El año pasado un estudio del BID reveló que existe todavía "una gran incertidumbre sobre la eficacia de esas intervenciones para mejorar el aprendizaje".

Según el informe, apenas el 14 % de esos proyectos se benefició "considerablemente" del avance tecnológico, el 57 % obtuvo "beneficios parciales" y el 29 % "un beneficio mínimo".

En Uruguay el oficialismo y la oposición suscribieron este año un pacto para reformar la educación, ante el peligroso fenómeno de la deserción escolar.

Datos del Instituto Nacional de la Juventud apuntan a que el 64 % de los jóvenes de edades entre 20 y 29 años no ha culminado la educación media y el 30 % de los adolescentes se desvincula del ciclo básico en la educación media.

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