El presidente de Fiat, preocupado por la caída del consumo en España

  • El presidente del grupo industrial FIAT, John Elkann, ha expresado hoy su preocupación por la importante caída del consumo en España como consecuencia de las políticas de austeridad que se aplican y que acaban generando "una espiral negativa".

Barcelona, 12 nov.- El presidente del grupo industrial FIAT, John Elkann, ha expresado hoy su preocupación por la importante caída del consumo en España como consecuencia de las políticas de austeridad que se aplican y que acaban generando "una espiral negativa".

Durante su intervención en el XV Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que se celebra hasta el próximo miércoles en Barcelona, Elkann ha señalado que "la austeridad es buena pero hace caer el consumo y eso nos preocupa a todos porque abre una espiral negativa".

El máximo dirigente del grupo automovilístico ha admitido que una caída del consumo de la magnitud de la registrada en España "impone condiciones muy difíciles para operar" en el país por parte de las empresas, algo que también ocurre en otros países del sur de Europa.

"Los recortes no son la solución a la crisis", ha señalado, tras defender que las empresas familiares, al igual que otros agentes de la realidad económica y política española, se "involucren" en la búsqueda de una salida a la situación actual.

Pese a ello, se ha mostrado optimista respecto a las posibilidades de España de mejorar la situación de su economía por considerar que el país es suficientemente atractivo a las inversiones extranjeras.

En concreto, Elkann se ha referido a la "competitividad" de las fábricas españolas del sector del motor, lo que explica, a su juicio, que multinacionales hayan cerrado plantas en algunos países europeos mientras que han conservado las ubicadas en España.

El grupo Fiat es una multinacional de origen familiar que emplea a 200.000 trabajadores a todo el mundo y que en España opera a través de Iveco.

Fiat Industrial tiene en marcha un plan industrial para Iveco en España que supondrá una inversión de 500 millones de euros en los próximos cuatro años y la creación de 1.200 empleos.

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