El real, que ha perdido un 30,8% de su valor en lo que va del año, cayó un 1,35% durante la jornada y cerró en 3,85 unidades por dólar, según la agencia de mercado CMA en Sao Paulo.
Durante la jornada se acercó a las 3,9 unidades por billete verde, en una profundización de la tendencia a la baja que muestra los últimos meses en medio del complejo clima político y económico que enfrenta Brasil este año.
En toda su historia, desde que entró en circulación el 1 de julio de 1994, el real nunca ha llegado a cotizarse en 4 unidades por dólar. En octubre de 2002, días antes de la primera elección de Luiz Inacio Lula da Silva, el real cayó a su mínimo histórico de 3,955 por dólar.
"Aún esperamos que el real se debilite más", dijo más temprano Joao Pedro Ribeiro, economista de la corredora Nomura, citado por el sitio online del diario O Estado de Sao Paulo.
Según el experto, "la perspectiva aún negativa y las posibles implicaciones prácticas para los inversionistas que pueden ser forzados a deshacerse de activos del gobierno brasileño" pueden impactar la moneda local aún más, añadió.
El principal indicador de la bolsa paulista, el Ibovespa, retrocedió 0,33% y cerró en 46.503 puntos, informó la plaza bursátil.
En la apertura la bolsa paulista, la mayor de América Latina, el indicador había caído hasta 2,2% pero moderó su retroceso al cierre.
S&P anunció el miércoles por la noche que bajó la nota de la deuda soberana de Brasil al grado especulativo ante su incapacidad de llevar adelante un ajuste fiscal. La nota de la deuda en divisas de Brasil fue rebajada de BBB- a BB+, con perspectiva negativa, en momentos en que el gobierno de la séptima economía mundial enfrenta dificultades para apretar el cinturón fiscal en medio de una recesión que según analistas puede durar hasta dos años.
La nota de la deuda en moneda local fue rebajada de BBB+ a BBB-.
"La realidad de Brasil es muy dura", comentó a la AFP Alex Agostini, economista jefe de la calificadora de riesgo brasileña Austin Rating.
"Y las perspectivas son aún peores. Pueden ocurrir nuevas rebajas", añadió el analista, asegurando que Brasil "necesita cohesión política, claridad y transparencia para reconquistar la confianza".
"No será fácil ni se logrará en un año", alertó.
Analistas ya prevén que la economía no sólo caerá en 2015, sino también en 2016.
La tarde de este jueves, S&P se convirtió en la segunda agencia de calificación internacional (después de Moody's) en rebajar también la nota de deuda de la petrolera estatal Petrobras, envuelta en un megaescándalo de corrupción que salpica a empresarios y políticos.
La calificación de la deuda fue rebajada de BBB-, último escalafón del grado de inversión, a BB con perspectiva negativa. La empresa enfrenta un enorme escándalo de corrupción que le ha costado más de 2.000 millones de dólares, llevado a la cárcel a importantes empresarios y puesto bajo la lupa a decenas de políticos.
Las acciones preferenciales de la petrolera cayeron 5% al cierre de la jornada a 7,97 reales.
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