El recibo de la luz no subirá en julio, pero el Gobierno no descarta futuros incrementos

  • Es la primera medida de un pacto de Estado que quieren alcanzar PP y PSOE sobre la energía. La subida prevista era del 4% y se iba a aplicar a partir del próximo jueves, 1 de julio.
El Gobierno suspende la subida de la luz prevista para julio
El Gobierno suspende la subida de la luz prevista para julio
Beatriz Toribio

El Gobierno ha dado marcha atrás y ha suspendido la subida prevista del 4% en el recibo de la luz que debía aplicarse el próximo mes de julio. Y lo ha hecho tras un acuerdo con el principal partido de la oposición en el marco de un pacto de Estado sobre la energía que, por ahora, no tiene más medidas concretas.

Pero el ministro de Industria, Miguel Sebastián, no ha querido descartar si habrá nuevos incrementos este año. "Suspendemos  esta subida de la tarifa eléctrica y nos damos un tiempo para revisar los costes y después hablaremos de los ingresos y si se acometen más subidas", ha dicho Sebastián.

¿Qué ha cambiado para que PP y PSOE se pongan de acuerdo en algo? "Que la situación económica es cada vez más difícil y tenemos que salir cuanto antes de la crisis", ha dicho Sebastián.

Por su parte, el portavoz económico del PP, Cristobal Montoro, ha destacado que con este acuerdo se da un mensaje de "tranquilidad y confianza a la inversión en nuestro país".

La congelación de la subida de la luz prevista para julio es el primer paso que el Gobierno y el PP dan a favor de un pacto de Estado para la energía que tendrá seis ejes: definir un 'mix energético' de cara al año 2020; desarrollar las infraestructuras y las interconexiones internacionales necesarias para garantizar el suministro; profundizar en la liberalización de los mercados y revisar los costes para que repercutan lo menos posible en la competitividad; reforzar la política de ahorro y de eficiencia energética;  cumplir los objetivos de energías renovables; y por último, desarrollar la seguridad nuclear y la gestión del los residuos.

Aún hay discrepancias

Ni Sebastián ni Montoro han querido pronunciarse sobre cuestiones que separan a los partidos a los que pertenecen, como el cierre de la central de Garoña o la ubicación de un cementerio nuclear.

"Vemos este pacto como un pacto de futuro" y lo afrontamos "sin líneas rojas", ha dicho el ministro. "Por supuesto que hay discrepancias en determinados asuntos, pero hoy hay que resaltar en lo que coincidimos", ha añadido Montoro.

Se creará un grupo de trabajo con representantes del Gobierno, el PP y otras formaciones políticas para avanzar hacia un acuerdo global para revisar el sistema energético español. Miguel Sebastián ha dicho que quiere sumar a este pacto al resto de partidos y que hoy mismo se ha puesto en contacto con CiU.

Críticas de los empresarios

La patronal Unesa ha reaccionado inmediatamente. Su presidente, Pedro Rivero, consideró hoy "muy grave" la decisión del Gobierno .Estamos esperando la confirmación del Ministerio de Industria y nos parece muy grave si eso se produce", señaló Rivero a preguntas de los periodistas durante el acto de presentación del 'Informe sobre las actividades eléctricas' en Madrid.

El ministro de Industria se ha mostrado "sorprendido" por estas críticas cuando  "todo el sector empresaria está pidiendo pactos de estado en cuestiones económicas"

La subida de la tarifa de la luz - una medida impopular en un momento de crisis económica, elevado paro e incremento del impuesto sobre el valor añadido (IVA) a partir de julio - estaba calculada para hacer frente a unos costes del sistema eléctrico que superarán los 6.000 millones de euros este año.

El Gobierno había propuesto un alza de hasta el 10 por ciento de una de las tarifas de acceso a la red, uno de los componentes de la tarifa final, que según fuentes industriales se habría traducido en un alza del precio de la luz del 4 por ciento para los hogares.

El regulador del mercado energético español, la Comisión Nacional de la Energía, había dado su visto bueno a esta propuesta.

España ha liberalizado su sistema eléctrico, aunque el Gobierno fija algunas tarifas, como la de acceso a la red, y establece la llamada Tarifa de Último Recurso (TUR) a la que pueden acogerse los pequeños consumidores.

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