"Han sido de gran utilidad para los conductores pero ya han cumplido su función". Con esas palabras Pere Navarro, director general de la DGT, da por amortizados los postes SOS de las carreteras españolas. La crisis llega a todos los departamentos y Tráfico quiere ahorrar recortando gastos innecesarios.
Hace unos años eran imprescindibles, pero hoy prácticamente nadie los usa. Los postes de SOS que pueblan los arcenes de nuestras carreteras han pasado en dos décadas de ser una apuesta infraestructural necesaria a plantear la necesidad de su retirada.
La Dirección General de Tráfico calcula que se ahorrará 2,5 millones de euros con la retirada de 5.800 postes SOS ubicados en las carreteras de España, según datos facilitados por el director general de la DGT, Pere Navarro.
La generalización del teléfono móvil ha condenado a muerte a los postes SOS que se instalaron por toda España en la década de los '80, ya que en diez años, entre 2000 y 2009, su uso ha descendido en un 80%, pasando de 50.000 usuarios a los 11.000 actuales.
El desmantelamiento de los postes, que serán enviados a una planta de tratamiento, se llevará a cabo en los próximos tres años y únicamente se respetarán aquellos que se encuentran instalados en zonas donde no existe la cobertura de las operadoras de móviles o llega muy débilmente.
Las principales asociaciones automovilísticas acogen con normalidad el anuncio: tanto el RACE, la AEA y el CEA consideran "justificada" la medida, pero han pedido que el teléfono de información sobre tráfico y auxilio en carretera se mantenga gratuito y que se compruebe que todos los operadores móviles tienen cobertura en los lugares que se quiten los postes.
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