Empleo parcial y formación dual, claves para seguir creando empleo

La falta de flexibilidad ha convertido al mercado laboral español en uno de los menos competitivos, menos productivos y con mayor tasa de desempleo de Europa. Sin embargo, existe una herramienta que ayuda a generar empleo y flexibilizar el mercado de trabajo, que se aplica con éxito en países como Alemania y Holanda, donde la tasa de paro apenas llega al 5% y al 7%, respectivamente.Se trata del empleo a tiempo parcial, una modalidad de contrato ampliamente asentada en Holanda -donde la mitad de los trabajadores trabajan a tiempo parcial- y que en España parece asustar a los empresarios y los sindicatos y a una buena parte de los trabajadores.

En nuestro país sólo un 15% de los contratos son a tiempo parcial, lejos de la media de la Unión Europea, que supera el 20%. Con este porcentaje de empleo a tiempo parcial tan poco europeo no perdemos algunas ventajas de la que disfrutan alemanes y holandeses, un mercado laboral sin apenas parados, competitivo, productivo y con trabajadores con tiempo para la familia, por ejemplo.

El profesor del IESE Business School Sandalio Gómez López-Egea se ha mostrado, en diferentes trabajos y conferencias, en un firme defensor de esta forma de trabajo y considera que España debería fijarse como meta conseguir que al menos uno de cada cinco trabajadores optasen por este tipo de contrato. El profesor Gómez que cree debe cambiar la mentalidad, sobre todo de empresarios y sindicatos, y concienciar de que sirve para generar empleo, conciliar trabajo y familia y para dar productividad a las empresas.

Sandalio Gómez asegura a Te Interesa que el trabajo a tiempo parcial, "que puede ser temporal o indefinido", no debe ser precario y no tiene por que estar mal pagado, tal como sucede en Holanda, un país que pone como referente.

En ese país, asegura, los empresarios han comprobado que permite flexibilizar la organización del tiempo de trabajo y mantener el nivel de productividad sin que se reduzca el grado de implicación, "más bien al contrario", ya que esa permisividad con la jornada laboral se traduce en motivación. "Nos debemos quitar de la cabeza que a los trabajadores con contratos a tiempo parcial se les cae el lapiz cuando llega la hora de salir", asegura.

Por su parte, los sindicatos, "deben darse cuenta en España que no es un contrato precario si se ofrecen las mismas prestaciones económicas y los derechos sociales que en el resto de modalidades de contratación. Así sucede en Holanda y otros países", advierte.

Mientras, señala que el Gobierno debe ver en esta opción una respuesta a la demanda de una parte de la población, que desea conciliar su vida laboral y familiar.

"La experiencia holandesa demuestra que el trabajo a tiempo parcial puede convertirse en motor de la creación de empleo e indica el camino que debería seguir España para dar un impulso decisivo a este tipo de contrataciones y situarse al nivel de la media europea", concluye.Medidas para incentivar el empleo

Gómez incide que para mejore nuestro mercado laboral se debe trabajar en dos direcciones. Por una parte, trabajar para reducir el desempleo "orientando a los parados, formando de forma específica y ayudando a encontrar trabajos a través, entre otros medios, de las agencias de colocación". Por otra parte, se debe trabajar para impulsar el empleo, asegura. En esta labor es primordial la labor de administraciones, sindicatos y empresarios.
Buenas perspectivas laborales

Sandalio Gómez señala que la EPA que se conoció ayer confirma una tendencia que empezó a principio de año. "El circulo vicioso del crecimiento está ahí", asegura, al tiempo que confirma laboral está teniendo efectos positivos.

"Las perspectivas son buenas y la realidad hacen que sean mejores de lo que se espera, por eso cambian constantemente las previsiones", añade. "Vamos a más y, al margen del balance político, con los resultados de la EPA te quedas asombrado. El crecimiento es una realidad", asegura.

Asegura el profesor que una de las primeras cualidades que debe tener un país es la de reconocer con realismo su situación económica y actuar en consecuencia. En septiembre de 2007 nos costó reconocer que estábamos empezando una crisis económica muy importante, y en la actualidad nos está costando reconocer que hemos iniciado un ciclo económico positivo y que todas las previsiones que se realizaron hace un año están revisándose al alza.

"Los resultados del empleo son fruto de una realidad económica positiva y de unas expectativas que irán mejorando hasta final de año. Esto nos lleva a tener una actitud optimista para seguir impulsando las políticas de generación de empleo que favorezcan la entrada en el mercado laboral de los más jóvenes y también de los mayores de 50 años, los colectivos que se están encontrando con más dificultades para retornar o acceder al mismo por primera vez", admite.El empleo a tiempo parcial en EuropaEl empleo a tiempo a parcial ha crecido en España durante los últimos cinco años -los más duros de la crisis- y ha pasado de representar el 12,6% del total del empleo en 2009 a un porcentaje del 15,9% el año pasado, según lso datos que maneja el Instituto de Estudios Económicos (IEE) a partir de informes de Eurostat.Holanda, con diferencia, es el país con mayor de empleo a tiempo parcial. Uno de cada dos trabajadores tiene este tipo de contrato, que se ha mostrado muy eficiente como fómula para integrar a la mujer al mercado laboral, para conciliar la vida laboral y para incrementar la producitividad de las empresas, garantizando los derechos de los trabajadores.En Alemania la tasa se sitúa en el 26,2%, seguida por Austria (25,7%), Reino Unido (25,5%), Dinamarca y Suecia (24,7%), Bélgica (24,3%) e Irlanda (23,5%), todos ellos por encima de la media de la UE-28, situada en el 19,5%.Por encima del 10% aparecen Luxemburgo (18,7%), Francia (18,1%), Italia (17,7%), Malta y Finlandia (14%), Chipre (11,9%) y Portugal (10,9%). España ocupa el puesto 12 con una tasa del 15,9%.Con una tasa de parcialidad inferior al 10% se sitúan Eslovenia (9,3%), Estonia (8,9%), Rumanía (8,8%), Lituania (8,4%), Grecia (8,2%), Letonia (7,5%), Polonia (7,1%), Hungría (6,3%), Croacia (6,2%), República Checa (5,8%), Eslovaquia (4,5%) y Bulgaria (2,5%).Una herramienta contra el empleo juvenil

Siete años después del inicio de la crisis, más del 50% de los jóvenes españoles se encuentran en situación de desempleo. Este dato es similar al de muchos países europeos, exceptuando Alemania, cuya tasa de desempleo juvenil se ha mantenido estable con cifras siempre por debajo del 8%.

Desde hace varios años en Alemania se ha instaurado la enseñanza dual profesional. En ella, y durante tres años, los jóvenes aprenden un oficio desde su base a la vez que realizan prácticas en empresas para poder afianzar los conocimientos teóricos. En el marco de las conferencias de Antiguos Alumnos, la Escuela de Negocios IESE ha reunido a varios expertos en este ámbito para poder desgranar los beneficios de esta enseñanza dual y además, poner en contexto el porqué de esa tasa de desempleo es tan baja en los jóvenes.

El profesor del IESE Sandalio Gómez ha destacado que la sociedad española necesita crear, generar algo que genere nuevas expectativas. Los encargados de ello no solo son los propios ciudadanos, sino también los empresarios, los sindicatos y los gobiernos. "Los empresarios y los sindicatos no solo deben justificar el porqué de la situación actual, sino dar un paso adelante y mostrar valores de solidaridad, lealtad y de capacidad de ponerse al servicio de la generación de empleo", ha añadido el Profesor Gómez.

Fernando Carro, de Bertelsmann, ha explicado que debido a su situación económica, su adelanto en aplicar reformas antes de que la crisis fuera tan grave, la mentalidad alemana y el apoyo constante a la gente joven, son las razones por las cuales la tasa de desempleo juvenil es tan baja en ese país. "En Alemania, ante las dificultades, trabajadores y empresarios reman en una misma dirección. En España no hay cultura de esto, prefieren reducir empleos antes que bajarse los sueldos", ha dicho Carro.

Sobre la formación dual profesional, Ramón Paredes, de SEAT, ha explicado que en Alemania es casi como una profesión ya que los alumnos trabajan durante ocho horas y alternan un 50% de teoría y otro 50% de prácticas. "Aprendiz es una palabra maravillosa, es una palabra que tenemos que poner en valor", ha dicho Paredes. Como ha indicado, en el modelo de formación dual alemán, se pretenden desarrollar las habilidades, las capacidades y las competencias técnicas y sociales.

Por ello preparan esa formación afecta a tres dimensiones: al individuo y sus competencias, su integración en la empresa y en la dimensión económica de la empresa y a su vez en el desarrollo económico del país.

En la formación dual profesional alemana, todos los alumnos aprenden un oficio desde la base, de forma estructura, por ello todo funciona mejor, y eso repercute en el funcionamiento del país. Como ha dicho Francisco Belil, de Bertelsmann y consejero de Abelló Linde, esta formación dual marca una diferencia en el país, ya que por ejemplo, para los padres "no es prioritario estudiar una carrera universitaria, tienen claro que la formación profesional no cierra puertas sino que las abre".

En el mundo empresarial español la formación de los jóvenes se ve como un gasto y no como una inversión. "Es vital convencer al empresario de que esa inversión va a tener un retorno ", ha indicado Ramón Paredes. Como ha añadido Fernando Carro, "hay que convencer a los empresarios de que es una necesidad, es la clave". "Las empresas alemanas tienen claro que con el futuro no se juega, nunca reducirían sus inversiones en investigación o formación, ya que son las principales palancas para influenciar en el futuro", ha dicho Francisco Belil.

Desde Bertelsmann han implantado esta enseñanza dual profesional en numerosos centros de enseñanza alemanes y les gustaría también poder implantarlo en España ya que su fundación se centra en el empleo juvenil en nuestro país. Y, ¿qué pueden aportar? Para ellos las claves de lo que pueden hacer por los jóvenes reside en orientales profesionalmente, de manera estructurada y sistemática, que les ayude a descubrir su potencial pero, a la vez, orientándoles hacia profesiones que puedan necesitarse en unos años. "Debemos intentar cambiar la imagen de la formación profesional en España", ha añadido Belil, "ya que en España carece de prestigio".

Todos los expertos coinciden en que la empresa debe involucrarse en esta formación, ya que la formula del éxito de esta es que las empresas tomen la batuta.