HSBC reduce sus beneficios en un momento de "desafíos" e "incertidumbre"

Patricia Rodríguez

Londres, 4 ago.- El HSBC, segunda entidad financiera más grande del mundo por capitalización, redujo su beneficio neto en un 5 % durante el primer semestre del año en un momento de "desafíos" y en el que persiste la "incertidumbre reguladora", según explicó hoy el banco.

La entidad publicó su último balance de cuentas en la Bolsa de Valores de Londres, en un comunicado donde se refleja que desde enero hasta el 30 de junio de 2014 su beneficio después de impuestos fue de 9.460 millones de dólares (7.044 millones de euros o 5.621 millones de libras).

Esa cifra representa un 5 % menos comparada con los 9.998 millones de dólares (7.445 millones de euros o 5.941 millones de libras) registrados durante ese periodo en 2013.

"Las exigencias impuestas ahora sobre el capital humano de la firma y sobre nuestras capacidades operacionales y de sistemas no tienen precedentes", apuntó Stuart Gulliver, el consejero delegado del HSBC, al referirse a esta última partida de resultados.

En su opinión, éstos "demuestran la resistencia del modelo de negocio (del grupo)".

"Aunque persiste la incertidumbre reguladora, nuestras cuentas continúan siendo sólidas y nuestra habilidad continuada para generar capital respalda tanto el crecimiento como nuestra política de dividendos progresiva", dijo Gulliver, para quien el banco afronta "desafíos" derivados de reformas reguladoras acometidas en todo el mundo.

El HSBC, que utiliza los dólares como divisa para presentar sus resultados, obtuvo un beneficio bruto durante el pasado semestre de 12.340 millones de dólares (7.332 millones de libras o 9.191 millones de euros).

Se trató de un descenso del 12 % frente al beneficio antes de impuestos que había registrado durante ese periodo del pasado año, cuando fue de 14.071 millones de dólares (8.359 millones de libras o 10.479 millones de euros).

Por su parte, al analizar los resultados, Douglas Flint, el presidente del grupo, explicó que "durante la primera mitad de 2014, frente a una situación en general de continuados tipos de interés bajos y reducidos volúmenes financieros de mercado, el HSBC produjo un rendimiento financiero convenientemente bien equilibrado".

Esa gestión se logró al tiempo que el banco "siguió invirtiendo recursos y tiempo considerables para remodelar el grupo y cumplir con las expectativas en constante evolución de nuestros reguladores y las comunidades a las que servimos".

A la vista de recientes escándalos en los que se han visto involucrados varias entidades bancarias británicas, como el de la manipulación del Líbor -tasa de interés interbancario-, Flint alertó sobre los peligros que podría generar la creciente "aversión al riesgo sin garantías" por parte de los banqueros en un momento en el que las entidades buscan protegerse.

Esos temores a la hora de tomar decisiones podrían, según esto, tener como resultado la restricción del acceso al sistema financiero.

"Un mayor foco en riesgos de delitos financieros y de conducta en todos los niveles de la firma a nivel global es claramente la respuesta adecuada frente a las carencias pasadas", dijo.

Durante los pasados seis meses, el HSBC dispuso la cantidad de 234 millones de dólares (139 millones de libras o 174 millones de euros) a fin de destinarla a los llamados "programas de reparación al cliente" para cubrir costes derivados de productos malvendidos por la entidad, como el llamado "Pago de Protección de Seguros" (PPI).

Con ello, el banco confía en reducir los costes procedentes de la "gravedad de enmiendas futuras al cliente".

La facturación del HSBC desde enero hasta el pasado 30 de junio fue de 31.167 millones de dólares (18.522 millones de libras o 23.211 millones de euros), menor también que los ingresos obtenidos en los primeros seis meses de 2013, cifrados en 34.372 millones de dólares (20.426 millones de libras o 25.598 millones de euros).

En cuanto a los costes operativos durante el periodo citado, estos fueron de un total de 271 millones de dólares (161 millones de libras o 119 millones de euros), menores que los 746 millones de dólares (555 millones de libras o 443 millones de euros) del primer semestre del 2013.