Iglesias:En 2011 culminará la reducción de los impuestos de sucesiones de las empresas familiares

Zaragoza.- El presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, ha garantizado hoy que en 2011 culminará el proceso de reducción del impuesto de sucesiones para las empresas familiares aragonesas.

Así lo ha recordado durante la inauguración del XII Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que se celebra hoy y mañana en el Palacio de Congresos de la Expo de Zaragoza, y en la que ha estado acompañado por el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Alberto Larraz.

Iglesias ha dicho que, para favorecer la continuidad de las empresas familiares y acabar con la desigualdad en esta materia con las CCAA limítrofes, como el País Vasco o Navarra, han avanzado hacia la desaparición del impuesto de sucesión, proceso que concluirá en 2011, cuando el valor del negocio no sometido a gravamen alcanzará el 99 por ciento.

En este sentido, ha recordado que de este modo cumple con una de las grandes reivindicaciones de estos empresarios y con uno de sus compromisos en el discurso de investidura, a pesar de la situación económica, como es la progresiva mejora de la fiscalidad, tanto en las sucesiones como en las donaciones.

Ha destacado el papel de la empresa familiar en todos los sectores de la economía, como la energía, la logística, la industria alimentaria y la automovilística o el turismo, ya que este tipo de compañías se identifican más con el territorio y la sociedad, ha dicho.

Para Iglesias, son un "elemento clave" en el tejido empresarial, tienen carácter emprendedor y sólidos principios, además de valentía, constancia y visión a largo plazo.

El Gobierno de Aragón, ha añadido, no ahorra medidas para favorecer la continuidad de las empresas familiares "en un mercado cada día más cambiante y más global".

Se ha mostrado partidario de mirar hacia el futuro con optimismo y de considerar la crisis como una oportunidad en un mercado de economías abiertas, ya que, aunque se están atravesando momentos difíciles, no se resuelve nada diciendo que no tiene solución, un discurso que ha considerado absolutamente "fácil e ineficaz".

Ha insistido en que Aragón "no tiene contraindicaciones" y que es un buen lugar para hacer negocios e invertir, al tiempo que ha destacado el "buen clima social" que impera en la Comunidad, logrado con la "colaboración inestimable" de los agentes sociales.

Este clima social, entre empresas, sindicatos y Gobierno, es según el presidente aragonés "una de las señas que identifica a Aragón y hace de la Comunidad Autónoma un enclave atractivo para proyectos de desarrollo de futuro".

Un "esfuerzo colectivo" que, ha subrayado, dará sus frutos en los próximos meses, con la recuperación de la senda del crecimiento.