La compra de Banco de Valencia comportará un ajuste de 233 millones

Barcelona, 27 nov.- CaixaBank calcula que la adquisición de Banco de Valencia obligará a efectuar una reestructuración por importe de 233 millones de euros brutos, aunque estima que a partir del año 2014 esta integración generará unos ahorros de costes anuales de 85 millones.

El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha acordado hoy vender el Banco de Valencia a Caixabank por un euro, tras inyectar previamente 4.500 millones a la entidad valenciana.

En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), CaixaBank señala que el cierre de la transacción está previsto para el primer trimestre de 2013 y espera que la adquisición tenga un impacto positivo en el beneficio por acción de la entidad catalana desde el primer año.

Banco de Valencia tiene unos activos de 20.704 millones de euros, una red de 423 oficinas, 400.000 clientes y una plantilla de 2.113 empleados.

El 88 % de sus clientes son particulares (351.000), mientras que el 12 % restante son pymes (49.000).

Banco de Valencia tiene una presencia significativa en la zona de Levante, ya que el 74 % de sus oficinas están situadas en Castellón, Valencia, Alicante y Murcia.

El total de recursos de clientes en balance es de 11.425 millones a septiembre de 2012, en tanto que el total de la cartera crediticia neta asciende a 15.227 millones.

Con esta adquisición, CaixaBank, que recientemente ha completado la compra de Banca Cívica, consolida su liderazgo en el mercado español, con un volumen total de activos de 365.000 millones, por delante del Santander (331.000) y BBVA tras la compra del catalán Unnim Banc (322.000).

CaixaBank adquirirá por un euro la totalidad de las acciones de Banco de Valencia titularidad del FROB tras un desembolso, por parte de esta entidad, de 4.500 millones de euros en un aumento de capital.

Previamente a la recapitalización, los accionistas actuales soportarán las pérdidas en las que haya incurrido la entidad, según ha informado el FROB.

Además del traspaso de los activos inmobiliarios a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), el Banco de España concederá a Banco de Valencia un esquema de protección de activos por el que, durante un plazo de diez años y para una cartera de activos predeterminada, el FROB asumirá el 72,5 % de las pérdidas derivadas de dicha cartera, una vez absorbidas las provisiones constituidas a 30 de septiembre sobre estos activos.