La danesa Novozymes estudia la apertura de nuevas plantas en Brasil

Sao Paulo, 29 may.- La compañía danesa de enzimas industriales Novozymes estudia la apertura de nuevas unidades de producción en Brasil para atender a la industria de biocombustibles de segunda generación, anunciaron hoy fuentes de la empresa.

La firma, que tiene una planta y un centro de investigación en el área metropolitana de Curitiba, sur de Brasil, definirá entre los próximos seis a nueve meses la localización de una o varias unidades especializadas en enzimas para biocombustibles avanzados.

En una entrevista con Efe, el presidente para América Latina de la firma, Pedro Luiz Fernandes, precisó que la ubicación más probable estará en el lugar donde se encuentra la materia prima, que en Brasil es de forma predominante la caña de azúcar.

Fernandes, quien no aportó una cifra de inversión, precisó que el proyecto todavía está en fase preliminar y que el diseño está en función de la demanda de sus clientes.

En su opinión, tras un importante desarrollo en la década de los noventa, el descubrimiento del presal, reservas de hidrocarburos a gran profundidad en el Atlántico, desplazó el "foco" de los biocombustibles en Brasil, mayor productor mundial de etanol de caña de azúcar.

Sin embargo, el empresario destacó el potencial del gigante latinoamericano para avanzar en ese campo y añadió que Brasil tiene posibilidades de situarse junto a EE.UU. como las potencias de desarrollo de los biocombustibles renovables avanzados.

En la actualidad, la producción mundial de etanol está liderada por EE.UU. y Brasil, país donde el 90 por ciento de los automóviles que salen de las líneas de montaje tienen motor flex fuel, que permite la combustión con gasolina o etanol o con la mezcla de ambos.

El jefe del departamento del negocio de celulosa de la firma, Sebastian Soderberg, dijo que Brasil dispone de "la misma oportunidad" de desarrollar una industria de biocombustibles de segunda generación en la actualidad.

"Brasil puede adoptar un papel destacado" en los biocombustibles avanzados como sucedió en la década de los noventa con los de primera generación, agregó.

Los biocombustibles avanzados son los que se fabrican a partir de la celulosa de la biomasa de productos como la paja del trigo, los tallos de maíz, el bagazo de la caña de azúcar y los desechos domésticos, entre otros.

Soderberg destacó como elementos que apuntalan su afirmación las previsiones de aumento de la demanda en el país, así como el potencial de los biocombustibles en la sustitución de la gasolina.

Novozymes cerró recientemente un acuerdo con la empresa brasileña de bioenergía GraalBio para proveer de tecnología de enzimas la nueva planta de etanol de celulosa que la firma establecerá el próximo año en el estado nororiental de Alagoas.

Estudios recientes prevén que Brasil puede llegar a producir 170.000 millones de litros de biocombustibles avanzados al año que lleven a la sustitución del 83 por ciento del consumo anual de gasolina hasta 2030.