La Fundación Renovables pide que se cierren centrales térmicas y nucleares

Madrid, 18 dic.- La Fundación Renovables ha propuesto hoy que se planifique el cierre de algunas centrales eléctricas térmicas -de carbón, gas natural y fuel- y nucleares porque, en su opinión, esto permitiría mejorar la competitividad industrial española y reducir las emisiones de CO2.

El presidente de la Fundación, Javier García Breva, ha explicado en un encuentro con periodistas que actualmente "sobra generación" para la demanda eléctrica que hay, por lo que las centrales térmicas tienden a subir sus precios de venta y esto encarece el recibo de la luz, reduciendo la competitividad de la economía.

Por este motivo, -unido a los objetivos europeos de reducir las importaciones de combustibles fósiles y las emisiones de CO2- "se debería empezar a estudiar un cierre de centrales" térmicas y nucleares.

Sin embargo, la Fundación advierte de que el proceso de cierre "tiene que ser algo ordenado y planificado", que se aplique "en dos o tres décadas", porque "el consumidor no puede hacerse cargo" del coste de estas operaciones.

Según García Breva, "las primeras centrales que tienen que empezar a retirarse son las de carbón y las de fuel", las más contaminantes y, a la larga, las menos eficientes económicamente, debido a la necesidad de comprar derechos de emisión.

Tras ellas, habría que estudiar las plantas de ciclo combinado -por su impacto en la balanza exterior, debido a las importaciones, y por las inversiones necesarias para reducir sus emisiones- y las nucleares, una tecnología que la Fundación considera "inviable económicamente" a no ser que el sector público se ocupe de la "responsabilidad civil" de los residuos y posibles incidentes.

En el calendario de propuestas de la Fundación para la planificación energética de los próximos años también figura el fomento del ahorro y la eficiencia energética, sobre todo, en lo que respecta a la rehabilitación de edificios, que consideran "vinculado al crecimiento económico y a la creación de empleo".

También proponen la recuperación de los incentivos a nuevas plantas renovables, la prohibición de explotar yacimientos de gas y petróleo no convencional y el fomento de la generación distribuida, entre otras cuestiones.

García Breva ha subrayado que esta sería una normativa de "transición" desde un modelo de "dependencia" de las importaciones fósiles y consumo creciente o otro basado en las "energías autóctonas", es decir, las renovables, en línea con los objetivos europeos.

En ese sentido, ha indicado que diversos estudios demuestran que en los últimos años la rentabilidad económica de las renovables "está mejorando", al tiempo que se reduce la de tecnologías basadas en combustibles fósiles, una "tendencia global" que indica cual será la prioridad de inversiones en los próximos años.