Taipei, 14 may.- La creciente indignación popular en Taiwán causada por la muerte el jueves de un pescador isleño por disparos de una patrullera filipina presiona al Gobierno y al Ejército taiwanés a tomar medidas más duras, lo que aumenta las tensiones.
Después del ultimátum de 72 horas del presidente taiwanés, Ma Ying-jeou, que finaliza hoy a las 24.00 horas y exige disculpas y el apresamiento de los responsables de la muerte del pescador taiwanés, el Ejército isleño anuncia maniobras militares cerca de Filipinas y la extensión de su patrullas en aguas donde se solapan las zonas económicas exclusivas de Taiwán y el país vecino.
Pescadores y ciudadanos taiwaneses quemaron banderas filipinas y fotografías del presidente de ese país ante la representación de Manila en Taipei el lunes.
Agencias de viajes y distribuidores de productos filipinos señalan una fuerte caída en la demanda tras el conflicto desencadenado por los disparos de la patrullera filipina.
La Marina taiwanesa extenderá sus patrullas hasta 100 millas náuticas al sur del canal de Bashi, que separa Taiwán y las Filipinas, más allá de la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán, afirmó hoy el viceministro de Defensa Andrew, ante el Parlamento.
El jefe de Estado Mayor de la Marina, almirante Hsu Pei-shan, ha confirmado que esta fuerza reajusta sus zonas de patrullas cerca de Filipinas para proteger mejor a los pesqueros taiwaneses y se modifican las normativas pertinentes para legalizar la nueva situación, a partir de finales de este mes.
En el futuro, la Marina taiwanesa podrá realizar misiones en una amplia zona cerca de las Filipinas, incluidas las aguas alrededor de las islas Batanes, con la excepción de 24 millas náuticas alrededor de esas islas.
Este reajuste del despliegue naval taiwanés responde a la nueva estrategia de su Guardia Costera, decidida a proteger mejor a sus pescadores y a impedir que se repitan incidentes como el del pasado jueves.
La Marina taiwanesa y la Guardia Costera realizarán unas maniobras militares el 16 de mayo, jueves, con la participación de fragatas tipo Kidd y Chengkung, agregó el mando de la Marina taiwanesa.
La fiscalía de Pingtung, encargada del caso en Taiwán, rectificó su información inicial tras un peritaje sobre el número de agujeros de bala encontrados en el barco, que finalmente son 45 y no más de 50, como se dijo en un primer momento.
Las tensiones colocan a EEUU en una situación difícil, ante la disputa de dos de sus aliados militares, y ofrece a China la oportunidad de granjearse las simpatías taiwanesas con su condena de la acción filipina.
Las disputas territoriales en el mar de China Meridional causan numerosos conflictos pesqueros y de explotación de recursos en esta zona, donde aún no hay suficientes acuerdos sobre las delimitaciones de aguas territoriales y zonas de pesca.
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