Las comunidades autónomas se ceban con las eléctricas para salvar sus cuentas

Las cuentas de las comunidades autónomas giran en un círculo vicioso de difícil salida. Por un lado, desde que pinchó la burbuja inmobiliaria han perdido gran parte de los ingresos que les generaba la compra venta de viviendas.

Por otro, el Gobierno central les presiona cada vez con más intensidad para que contribuyan de manera contundente y decidida a la reducción del déficit público del país con recortes presupuestarios adicionales. Algo más de tres años después del comienzo de la crisis, el sector eléctrico se ha convertido en uno de sus bancos favoritos para compensar los daños y perjuicios de la crisis.

Según datos recabados del sector, la presión fiscal sobre la empresas energéticas ha crecido desde el 27,7% hasta el 30,5% entre 2005 y 2008, el último año sobre el que hay cifras disponibles y en el que un 20,1% de los impuestos se aplicaron sobre el valor añadido bruto y el 10,4% sobre las ventas.

Las comunidades han creado impuestos específicos que afectan a las distintas actividades energéticas, desde la producción de energía eólica, como en el caso de Galicia, hasta la producción de las centrales nucleares, como en Castilla-La Mancha o Extremadura. En este último caso, el impuesto supone el 8,8% sobre las ventas. También se aplican tasas por ocupación del dominio público.

Otras comunidades están siguiendo el ejemplo. La Junta de Castilla y León anunció el pasado 10 de noviembre su intención de fijar un canon sobre la producción de energía en la comunidad para compensar la repercusión de esta actividad sobre el medio ambiente. La propuesta cuenta con el consenso de los partidos mayoritarios y podría suponer para la Junta unos ingresos entre os 50 y los 100 millones de euros al año.

Fuentes del sector eléctrico aseguran que estas medidas no hacen sino poner en peligro las inversiones futuras en estas comunidades.Pero la presión a estas compañías también se extiende al Gobierno central. Sobre la mesa esta la intención del Ejecutivo de promover una tasa a las centrales nucleares.

Cerco a las CCAA

El secretario de Estado de Economía, Carlos Ocaña, ya señaló la semana pasada que las comunidades autónomas pueden verse obligadas a dar otro tijeretazo a los prepuestos, incluso en las partidas que afectan al gasto social. El Gobierno central, que se ha comprometido a reducir el déficit público al 9,3% este año, al 6% por ciento en 2011 y al 3% por ciento en 2013, sigue estrechando el cerco.

El presidente Zapatero ha anunciado que el Consejo de Política Fiscal y Financiera se reunirá con las comunidades autónomas antes de que finalice este mes, tras recordar que en 2011 el conjunto de las administraciones públicas acometerán una reducción del déficit de 33.000 millones de euros y que la administración central asumirá dos tercios del esfuerzo total.