Las exportaciones portuguesas baten en mayo un nuevo récord mensual

Lisboa, 10 jul.- Las exportaciones portuguesas continuaron en alza en mayo al crecer un 5,6 % respecto al mismo periodo del año anterior y batieron un nuevo récord mensual, mientras que las importaciones se precipitaron un 3,2 %.

El incremento de las ventas al exterior en tasa anual se ralentizó tras el empuje de abril, cuando las exportaciones se dispararon un 16,8 %, según se desprende de los datos divulgados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En términos absolutos, las exportaciones portuguesas alcanzaron los 4.260 millones de euros en mayo, lo que supone el mejor dato mensual de su historia y que supera el anterior registro, alcanzado en marzo de 2012 (4.140 millones de euros).

La comercialización de bienes lusos en el exterior se recupera así de las caídas sufridas en febrero y marzo, con un aumento en mayo del 9,1 % en el caso de sus ventas a países extracomunitarios y del 4,1 % en el marco comunitario.

En términos de variación mensual, el incremento de las ventas fue del 3,5 por ciento en comparación con abril, empujado por las ventas de calzado y vehículos y otros materiales de transportes en el comercio dentro de la Unión Europea.

Asimismo, las importaciones volvieron a bajar en mayo un 3,2 % respecto del mismo mes del año anterior, después del repunte del 9,3 % registrado en abril tras un inicio de año de caídas.

De esta forma, el déficit comercial se redujo en casi mil millones de euros durante los cinco primeros meses de 2013 respecto al mismo período del ejercicio anterior, hasta los 3.200 millones de euros.

El equilibrio de la balanza comercial portuguesa se ha presentado como una de las claves para que el país salga de la recesión, según analistas económicos y organismos internacionales.

El Gobierno luso, de hecho, considera prioritario reforzar sus exportaciones y confía en la pujanza de países emergentes para compensar las perspectivas negativas de la crisis europea.

Portugal redujo su déficit comercial en 2012 en un 35 % gracias a un inusual descenso de las importaciones que compensó la ralentización registrada en la subida de las ventas al exterior.