Las relaciones económicas, protagonistas de la visita de Margallo a Argelia

Jorge Fuentelsaz

Argel, 12 abr.- Las relaciones económicas hispano-argelinas han sido las protagonistas de la vista de dos días llevada a cabo por el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, a Argelia, y que ha concluido con un encuentro con el presidente argelino, Abdelaziz Buteflika.

Margallo, que ha recordado la posición privilegiada de España como primer socio comercial de Argelia -con un volumen de negocio de más de 15.400 millones de dólares- anuales, ha abordado con los responsables argelinos desde cuestiones energéticas a culturales, pasando por temas turísticos, de agricultura, gestión de aguas o de vivienda.

En el aspecto energético, ha planteado a sus interlocutores la propuesta de España de interconectar las redes de distribución de gas y electricidad españolas con el resto de Europa a través de Francia, para abrir las puertas de Europa al gas y a la energía del Norte de África.

"España compra el 50 por ciento casi de su gas de Argelia y Europa depende en un 25 por ciento del gas de Rusia. Hay una convicción de que hay que ir reduciendo esa dependencia y para reducir esa dependencia hay que aumentar la oferta de provisión de gas desde el norte de África", dijo ayer el ministro español, que volvió hoy a plantear la misma idea en un foro económico hispano-argelino celebrado en un hotel de la capital.

Margallo, que mostró su satisfacción tras la visita, se reunió con su homólogo argelino, Ramtan Lamamra, con el ministro de Turismo, Mohamed Amin, con el primer ministro, Yusef Yusfi y, en el último momento, con el presidente Abdelaziz Buteflika.

En la reunión con Yusfi, exministro de Energía, la delegación de Margallo fue recibida por los ministros de Exteriores, Vivienda, Agua, Finanzas, Asuntos Africanos y Magrebíes.

Según comentó el jefe de la diplomacia española a la prensa, Argelia ha aumentado la oferta realizada a España para la construcción de 50.000 viviendas a 200.000.

A pesar de la suculenta oferta, las empresas españolas no parecen muy dispuestas a aceptar estos encargos debido a la poca rentabilidad económica que está ligada a las concesiones de urbanización de dichas zonas, que no siempre están garantizadas.

Según Margallo, el ministro argelino de Vivienda, Abdel Mayid Tabun, pronto estará en España para estudiar diversas fórmulas de cooperación al respecto.

En el marco de las relaciones económicas, Margallo también indicó que el Gobierno español presentará un "documento para el arbitraje como medio de solución de conflictos" entre las pequeñas y medianas empresas.

"Las pequeñas y medianas empresas consideran que uno de los obstáculos para invertir y hacer crecer sus inversiones y desarrollarse es la lentitud en la resolución de los contenciosos mercantiles por los procedimientos judiciales ordinarios. El arbitraje es una fórmula mucha más rápida y más barata y tenemos la enorme ventaja de que tenemos una cultura jurídica común", declaró el responsable español.

En el plano cultural, adelantó el proyecto de rehabilitar el edificio del antiguo consulado general español en Argel, situado junto a la sede del Instituto Cervantes, "para poder ampliar la oferta de español que, al parecer, tiene una demanda importante en este país".

Asimismo, anunció que en conmemoración del cuatrocientos aniversario del fallecimiento del escritor Miguel de Cervantes, que se cumple dentro de dos años, se organizarán varios actos en Argel, con motivo de los cinco años de cautiverio (1575-1580) que pasó en la ciudad.

Por otra parte, la visita de Margallo, que concluye la víspera de la última jornada de la campaña electoral, y a cinco días de las elecciones presidenciales, no ha estado exenta de polémica.

El mismo día de su llegada, los partidos opositores que componen la coordinadora por el boicot electoral denunciaron que el Gobierno estaba empleando las visitas de mandatarios y responsables extranjeros con fines electorales.

En este sentido, Margallo indicó que su visita no era excepcional y que se había llevado a cabo en el marco de las relaciones continuas y los "contactos periódicos" que mantienen ambos países.

"Este contacto se produce dentro de ese marco que no se altera por la circunstancia de que haya un proceso electoral", subrayó Margallo, que insistió en la neutralidad absoluta del ejecutivo español.

Durante sus dos días de visita, Margallo también trató la situación en el Sahel y en Mali en particular, así como en Libia, Túnez y Siria, además del tortuoso proceso de paz palestino-israelí.