Linde prefiere que las entidades reconozcan cuanto antes deterioro activos

  • El gobernador del Banco de España, Luis Maria Linde, se ha mostrado partidario de que las entidades reflejen el grado de deterioro de sus activos en cuanto las previsiones de pérdidas estimadas así lo aconsejen, y puedan reflejarlo adecuadamente en su balance.

Corrige la posición del Banco de España ante el deterioro de activos (FD2041)

Madrid, 9 jul.- El gobernador del Banco de España, Luis Maria Linde, se ha mostrado partidario de que las entidades reflejen el grado de deterioro de sus activos en cuanto las previsiones de pérdidas estimadas así lo aconsejen, y puedan reflejarlo adecuadamente en su balance.

Durante su intervención en el cuarto encuentro sobre la reforma del sistema financiero organizado por KPMG y el diario Expansión, Linde ha recordado que los organismos reguladores han alcanzado un acuerdo sobre el deterioro de los activos financieros y las provisiones por riesgo de crédito, en la que se contemplan dos posibilidades.

En uno de ellos es la propia entidad la que decide cuándo computar un activo como deteriorado; en el segundo, que es el que prefiere el Banco de España, se reduce la discrecionalidad de las entidades, que deben reconocer la totalidad de las pérdidas esperadas de un modo razonable, calculando sobre eventos futuros.

Según Linde, es conveniente no dejar "esta discrecionalidad al criterio de la entidad".

Segñun Linde, esta postura es además la que defiende el G20, que se ha mostrado "preocupado por el elemento procíclico" de la regulación actual.

En su intervención, y sobre las necesidades de capital que desde distintos ámbitos se les exige a las entidades financieras, ha reconocido que existe una gran presión sobre éstas, para que cumplan anticipadamente con los requisitos de la directiva Basilea III.

Sobre este punto ha sido muy claro, y ha advertido sobre los riesgos de aplicar anticipadamente los requerimientos de capital, lo que puede provocar una reacción procíclica.

No hay que olvidar, ha indicado, que en algunos países la debilidad del escenario macroeconómico aumenta la morosidad y, por consiguiente, los problemas para tener colchones suficientes; las entidades deben poder aprovechar el margen de que disponen para aumentar sus recursos propios.

Entre las tareas pendientes que debe abordar la reforma financiera no sólo en España sino en el ämbito europeo, Linde ha mencionado la necesidad de hacer una distinción clara entre entidades que prestan servicios a clientes minoristas de aquellas otras con perfil de riesgo más acentuado, una separación que no es compartida en países como Estados Unidos.

Mostrar comentarios