Los editores cierran con optimismo Liber 2013, con la mirada en Latinoamérica

Madrid, 6 oct.- Los editores españoles han cerrado con optimismo la 31 edición de la Feria Internacional del Libro Liber 2013, con unas ventas que han mejorado las del pasado año y con la mirada puesta en las exportaciones, principalmente a América Latina, que contrarrestan la caída del mercado nacional.

Así lo indicó hoy a Efe el presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), Javier Cortés, que destacó la actividad comercial que se ha desarrollado durante los tres días de celebración de esta feria por parte de distribuidores y bibliotecas procedentes de diferentes países latinoamericanos. Precisamente, Chile ha sido el país invitado este año.

Más del 30 por ciento de la producción editorial española se distribuye fuera del país, una actividad creciente en América Latina que ya el pasado año aumentó en más del 12 por ciento respecto a 2011, y que se repetirá probablemente este año, indicó.

Por el contrario, señaló Cortés, la actividad del mercado interno ha sido similar a la del pasado año, en el que se registró un descenso del diez por ciento.

Un mercado interior afectado por la caída de la edición de libros de texto, que supone más del 20 por ciento de la facturación del sector y que se encuentra a la espera de la reforma educativa impulsada por el conservador Gobierno español.

"La proyección internacional del sector editorial español está muy bien", subrayó el presidente de la FGEE, que considera que los profesionales de la edición deben aprovechar las oportunidades que les brinda el mercado latinoamericano, que aunque siempre ha estado presente en las exportaciones españolas, adquiere cada vez un mayor protagonismo.

Cortés recalcó también la facturación de las filiales de los grupos editoriales españoles en Latinoamérica, que el pasado año se elevó a 2.500 millones de euros (unos 3,8 millones de dólares).

México, Argentina y Brasil son los países latinoamericanos a los que más exportan las empresas españolas del sector, aunque casi todos tienen una presencia creciente.

También valoró el papel que realizan en la difusión del español, para lo que ha apostado por una mayor colaboración con el Instituto Cervantes.

Durante la feria, los editores reflexionaron también en mesas redondas sobre el futuro del sector y coincidieron en la necesidad de "regular bien" el consumo en el ámbito digital.

"Es clave para el sector. Se necesitan leyes justas y bien hechas para evitar el consumo irresponsable en internet", donde la piratería constituye una grave amenaza, dijo Cortés.

El presidente de la Federación destacó también la mayor proyección pública que la feria internacional del libro tuvo este año, en el que por primera vez se abrió al público durante tres días en el festival Liberatura.

"Para ser el primer año, el acercamiento de los autores y editores a los lectores ha sido un éxito", refirió Cortés.