Los empresarios exigen una reforma ambiciosa al G20 para el crecimiento

  • Los empresarios instaron hoy a los líderes del G20 a realizar una reforma ambiciosa para impulsar el crecimiento económico mundial y combatir el desempleo durante la cumbre que tendrá lugar este fin de semana en la ciudad australiana de Brisbane.

Rocío Otoya

Brisbane (Australia), 14 nov.- Los empresarios instaron hoy a los líderes del G20 a realizar una reforma ambiciosa para impulsar el crecimiento económico mundial y combatir el desempleo durante la cumbre que tendrá lugar este fin de semana en la ciudad australiana de Brisbane.

Los países miembros del G20 representan el 85 % del PIB mundial, el 80 % del comercio global y tienen dos tercios de la población total.

"Se debe crear un ambiente propicio para los negocios de forma que se estimule las inversiones, amplíe la productividad y aumente la actividad económica y el crecimiento", dijo el presidente del B20 (Business 20), Richard Goyder, director gerente de la empresa australiana Wesfarmer.

Una treintena de empresarios del B20 transmitieron estas inquietudes en una reunión al primer ministro australiano, Tony Abbott, anfitrión de la cumbre que tiene como objetivo lograr un crecimiento en un 2 % por encima de los pronósticos para el 2018 y con ello inyectar 2 billones de dólares a la economía mundial.

Ese objetivo, que deberá ser plasmado en el Plan de Acción de Brisbane que se anunciará en la clausura de la cumbre, el domingo, fue reajustado a la baja el pasado septiembre a un 1,8 % debido a que el crecimiento mundial ha sido más débil de los esperado, especialmente en Europa.

"El mundo estará substancialmente mejor a raíz de esto", indicó Abbott durante la reunión, al referirse a la agenda de la cumbre, que tiene un fuerte énfasis en el crecimiento y el empleo.

El B20 también presentó 20 recomendaciones centradas en cinco áreas claves: finanzas, capital humano, infraestructuras, comercio y transparencia para lograr las metas de crecimiento y creación de empleo.

Una de las iniciativas del G20 más celebradas por los empresarios es la de crear un "núcleo de infraestructura global" que facilite las inversiones en este sector en todo el mundo, lo que añadiría 600.000 millones de dólares al PIB mundial y aportaría unos 10 millones de empleos adicionales para 2030.

La posición empresarial para esta cumbre dista mucho de la que tienen las organizaciones de la sociedad civil C20, que reclaman un crecimiento inclusivo que beneficie al 20 % de la población más pobre.

El C20 también abogó por la creación de empleos de calidad, especialmente para los jóvenes, y la inclusión del impacto del cambio climático en la agenda de la cumbre, por entender que atañe a la economía aunque se niegue a hacerlo el país anfitrión, Australia, cuyo gobierno ha eliminado el impuesto a la emisión de gases contaminantes.

El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE, Ángel Gurría, también se pronunció hoy, para alertar de que los altos niveles de desigualdad pueden dañar el crecimiento a largo plazo, y para abogar por una mayor redistribución de los recursos.

Durante un encuentro con las organizaciones sindicales del G20 (L20) en Brisbane, Gurría explicó que un estudio que lleva a cabo su organismo muestra que si las desigualdades aumentan podrían provocar reducciones de hasta el 7,5 % del PIB por cápita en los próximos 25 años.

"Debemos tener cuidado en garantizar que las estrategias del G20 en crecimiento no solo impulsen este crecimiento y la creación de empleo, sino que también tengan en cuenta las desigualdades", dijo Gurría.

Según la OCDE, el 10 % de la población más rica tiene unos ingresos 10 veces superiores a los del 10 % de población más pobre, cuando en 1980 la diferencia era de 7 veces, y en 1990, de 8.

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, opinó que los objetivos de crecimiento que se ha impuesto el G20 en esta cumbre son "un paso en la dirección correcta si se implementan", en una entrevista concedida al diario Australian Financial Review y publicada ayer.

No obstante, Lagarde advirtió que el objetivo no creará todos los puestos de trabajo necesarios.

A pesar del énfasis económico, la cumbre del G20 también debatirá el brote de ébola, el cambio climático, la crisis en Ucrania y la amenaza terrorista. EFE

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