Los pescadores guipuzcoanos valoran el final de la veda pero no las cesiones

  • San Sebastián.- El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Guipúzcoa, Eugenio Elduayen, ha valorado la decisión de los ministros de Pesca de la UE de reabrir el año que viene el caladero de la anchoa del Golfo de Vizcaya, aunque ha criticado las cesiones de cuota a Francia.

La reapertura de la pesca de anchoa en el Golfo de Vizcaya "va a beneficiar mucho", cree un pescador
La reapertura de la pesca de anchoa en el Golfo de Vizcaya "va a beneficiar mucho", cree un pescador

San Sebastián.- El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Guipúzcoa, Eugenio Elduayen, ha valorado la decisión de los ministros de Pesca de la UE de reabrir el año que viene el caladero de la anchoa del Golfo de Vizcaya, aunque ha criticado las cesiones de cuota a Francia.

Elduayen, que regresa hoy a Guipúzcoa tras dos días en Bruselas para conocer de primera mano esta decisión comunitaria, ha explicado a Efe que el acuerdo de los ministros es "una buena noticia para el sector" tras cuatro años y medio de veda, y ha puesto de relieve que "se ha hecho un esfuerzo por parte de todos" para que los barcos de bajura dedicados a la anchoa puedan volver a faenar.

Sin embargo, ha criticado "la letra pequeña" de este acuerdo, ya que, según ha asegurado, a lo largo de estos años de veda los representantes de las cofradías vascas y francesas habían decidido que España cediese un 10 por ciento de su cuota de pesca, que tradicionalmente era de un 90 por ciento para España y de un 10 por ciento para Francia, así como 100 toneladas adicionales.

Según este acuerdo, con el que según Elduayen "cedían ambas partes", Francia quedaría con el 20 por ciento de la cuota más 100 toneladas, y sin embargo la decisión comunitaria ha establecido que Francia se haga con el 20 por ciento más 200 toneladas.

Otro de los aspectos que rechazan los "arrantzales" vascos es que durante el mes de mayo haya una cohabitación de las flotas gala y española, cuando los representantes de los dos sectores habían decidido que los franceses iniciaran las capturas de anchoa a partir de junio.

El hecho de que Francia pueda faenar junto a los barcos españoles en marzo, parar en abril y mayo, y volver a la mar en junio tampoco gusta a los pescadores de Guipúzcoa, aunque ha añadido que se tendrán que "conformar".

El acuerdo establece la apertura del caladero del Cantábrico, cerrado desde mediados de 2005 ante la mala situación de la anchoa, con una cota anual de 7.000 toneladas que se repartirán España y Francia y que será revisable a finales de junio de 2010, tras la publicación de los informes de primavera sobre las existencias de ese pez.

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