Los sindicatos advierten de que la reforma de la negociación colectiva podría alargarse hasta abril


Los líderes de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, afirmaron este miércoles que las conversaciones con las organizaciones empresariales para lograr un acuerdo sobre la reforma de la negociación colectiva podrían alargarse hasta el mes de abril.
En principio, la reforma laboral fijó como plazo máximo el próximo 19 de marzo, aunque el Ejecutivo ya ha declarado que espera que sindicatos y empresarios logren un consenso antes del día 24.
Sin embargo, en su intervención en una asamblea conjunta por el comienzo de la recogida de firmas de apoyo a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) contra la reforma laboral, el secretario general de CCOO afirmó que "no pasaría nada" por que la negociación se alargase hasta el mes de abril. "No es imprescindible acabar este mes, no pasa nada si es el siguiente", dijo Toxo.
Para el dirigente sindical, no hay "prisa" para lograr el acuerdo en esta materia, como tampoco la hubo en el caso de la reforma laboral, por lo que instó al Ejecutivo a que "no entre otra vez como elefante en cacharrería".
En este sentido, apuntó que las organizaciones sindicales y las empresariales "no nos hemos puesto plazo" para lograr el acuerdo y se mostró optimista sobre las posibilidades de consenso. "Puede acabar bien", dijo.
Por su parte, Méndez instó al Gobierno a mantener la tranquilidad y "no ponerse nervioso". "Es una negociación, pero que el Gobierno no se ponga nervioso", advirtió el líder de UGT, quien agregó que "los ritmos –de la negociación- los marcamos nosotros".
El secretario general de UGT reiteró que "lo mejor que puede hacer el Ejecutivo es no mostrar nerviosismo y no cometer los errores que cometió cuando negociábamos la reforma laboral". En su opinión, en la negociación de la reforma laboral "las expresiones públicas del Gobierno no la beneficiaron", sino que "la perjudicaron gravemente".
Asimismo, Toxo acusó al Ejecutivo de escuchar más a los lobbys, como la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), que a los "representantes legítimos de los trabajadores". El secretario general de CCOO denunció que los representantes de Fedea van "día sí y día también" a La Moncloa o a la sede del Ministerio de Economía y Hacienda "irrumpiendo para hacer destrozos otra vez".
REFORMA LABORAL
Sobre la recogida de firmas para la ILP en contra de la reforma laboral, los sindicatos se han fijado dos meses de plazo (hasta el 15 de mayo) para lograr las 500.000 firmas necesarias para que la propuesta llegue al Congreso.
En este sentido, Méndez advirtió al Gobierno de que las organizaciones sindicales "no olvidan" la reforma laboral y asegura que no han "pasado página", a pesar del Acuerdo Social y Económico firmado con el Ejecutivo.
Por esta razón, subraya que la ILP dará una "segunda oportunidad" al Gobierno para que rectifique esta reforma laboral que, según Toxo, está provocando "un incremento de la precariedad" y que no ha frenado el aumento del paro.
De esta forma, las organizaciones sindicales exigen al Ejecutivo y al Congreso una "rectificación radical" de la reforma para "corregir sus desequilibrios".
En este sentido, Toxo denunció que el plan no dedica "ni una sola línea" a hablar del paro, por lo que está obviando la situación de 25 millones de personas en toda la Unión.
Por otro lado, los secretarios generales de los sindicatos mayoritarios criticaron duramente el plan del euro aprobado por los países de la Eurozona y que, según Toxo, es la "iniciativa más reaccionaria" nacida en la Unión Europea.
También se refirieron a la convocatoria que les ha hecho el presidente del Gobierno para una reunión el próximo 23 de marzo.
Según Toxo, recibieron la carta del jefe del Ejecutivo cuando ya se sabía que el día 26 se iba a ver con los representantes de las principales empresas españolas. "Alguien cayó en la cuenta de que deberían invitarnos también", dijo.
Sobre este tema, Méndez apuntó que los sindicatos no saben lo que Zapatero les contará en esta reunión, pero sí que saben lo que ellos van a transmitirle, que es su "gran preocupación por lo que significa el denominado pacto del euro y por las consecuencias que puede acarrear".

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