Merkel avisa de nuevo: el QE no puede frenar las reformas

    • El riesgo de deflación ha dado al BCE el pretexto para decidir la inyección masiva de liquidez con compra de bonos soberanos, a la que Alemania siempre fue reacia.
    • La canciller alemana, Angela Merkel, ha reiterado que los países de la perifería deben mantener el pulso reformista a pesar del estímulo.
Merkel dice que hay que crear crecimiento con las medidas adecuadas
Merkel dice que hay que crear crecimiento con las medidas adecuadas
AA/Agencias
AA/Agencias

En la rueda de prensa en la que ha anunciado la puesta en marcha del programa, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), en un guiño quizás a Alermania, ha reiterado que es imprescindible que se trabaje y apliquen reformas con celeridad.

El Quantitative Easing (QE) dedidido hoy por la institución relajará la presión de las primas de riesgo y la deuda sobre los países. El peor temor de Alemania, y uno de los motivos por el que el Bundesbank se opuso en el pasado a un QE, es el temor a que los países al verse libres de la presión de la prima relajen el camino de la "consolidación fiscal".

La canciller alemana, Angela Merkel, desde el Foro de Davos (Suiza), ha dejado patente de nuevo ese temor. Merkel ha reiterado que los gobiernos de la Eurozona deberán seguir con las reformas, a pesar del enorme plan de compra de activos anunciado por el BCE.

"No podemos librarnos de las reformas estructurales, no es posible", aseguró

"Los ejemplos de España, Irlanda y Portugal, y en parte Grecia, demuestran que merece la pena hacer reformas; que se restablece el crecimiento", añadió la canciller refiriéndose a los países que fueron sometidos a programas de rescate, soberanos para Dublín, Atenas y Lisboa, y bancario para Madrid.

El objetivo del BCE es apoyar una Eurozona que creció 0,2% en el tercer trimestre y está además amenazada por la deflación (los precios cayeron un 0,2% en diciembre, cuando el objetivo de inflación es cercano al 2%).

Pero el debate sobre la competitividad de las economías europeas no cesa, y en su intervención, poco antes del anuncio hecho desde Fráncfort, Merkel dijo en Davos que "la decisión del BCE no debe desviarnos del camino" de las reformas necesarias.

"Ahora es cuando hay que sanear y consolidar los presupuestos, ahora que los tipos de interés son muy bajos", añadió Merkel, refiriéndose al bajo rendimiento de la deuda de los países europeos, que les permite financiarse más barato.

La compra de bonos por parte del BCE contribuirá a esa tendencia bajista de los intereses de la deuda pública en los 19 países de la Eurozona. De hecho, en el mercado secundario, una vez realizado el anuncio de Draghi el bono a diez años ya marca un mínimo histórico.

Mostrar comentarios