Parlamentarios del Mercosur viajan a elecciones paraguayas como observadores

Raúl Cortés

Montevideo, 13 abr.- Al menos quince integrantes del Parlamento del Mercosur (Parlasur) participarán como observadores en las elecciones presidenciales de Paraguay el día 21, que podrían significar el levantamiento de la suspensión a ese país como miembro del bloque.

En una entrevista con Efe, el secretario de Comunicación y Relaciones Institucionales del Parlasur, el brasileño Rafael Reis, explicó hoy que "según una lista provisional viajarían a Paraguay entre 15 y 17 parlamentarios" de Argentina, Brasil y Uruguay.

El desplazamiento de la delegación fue gestionado por el actual presidente del Parlasur, el paraguayo Ignacio Mendoza, ante el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) de Paraguay.

Ese detalle es considerado como "una señal muy importante" por Reis, que trabaja en el Parlasur desde la creación del organismo en 2007.

Denota que "aquella tensión inicial que había, ya ha bajado mucho", añadió el brasileño en alusión a la suspensión de Paraguay del bloque en junio de 2012 y a la paralización de las sesiones en el parlamento regional, al mes siguiente, por las discrepancias en su seno.

El Parlasur, lleva ocho meses sin acoger debates parlamentarios, y la interrupción de estos se debió a que un grupo pensaba que el caso paraguayo "no afectaba porque sus miembros son parlamentarios electos" y otro que sí "porque el Parlamento hace parte de la estructura institucional del bloque", relató Reis.

En la práctica se impuso la postura de los ministros de Exteriores de Argentina, Brasil y Uruguay (integrantes del Consejo del Mercado Común, uno de los órganos ejecutivos del grupo), según los cuales en ninguna pata de "la estructura institucional del Mercosur podían participar representantes paraguayos", recordó.

El alejamiento de Paraguay del Mercosur en junio de 2012 fue producto de la destitución de Fernando Lugo como presidente en un juicio político en el Senado considerado un "golpe de Estado parlamentario" por los demás miembros del bloque, que aprovecharon la ocasión para materializar el ingreso de Venezuela.

Ese último paso, autorizado años antes por los Ejecutivos y Legislativos argentino, brasileño y uruguayo, así como por el Gobierno de Lugo, estaba trabado por la negativa del Senado paraguayo.

Esta secuencia de acciones ha sido cuestionada, no solo por el Ejecutivo paraguayo que sucedió al de Lugo, sino también por los políticos de la región que participaron en la fundación del bloque o en sus primeros años de vida.

Aunque Venezuela recibirá de manos de Uruguay la presidencia pro témpore del Mercosur en la próxima cumbre semestral, prevista para el 28 de junio en Montevideo, todavía debe ratificar cientos de convenios internos del bloque para ser un miembro efectivo, entre ellos el que permitió la constitución del Parlasur.

Una vez lo haga, podrá designar también representantes para ese ente regional.

Desde su creación en 2007 y durante varios años, el Parlasur mantuvo un ritmo de actividad de una sesión al mes y una participación pactada de 18 legisladores.

Sin embargo, comenzó a perder fuelle por la falta de compromiso de los países a la hora de cumplir una condición según la cual debían elegir de forma directa a sus integrantes en sus comicios internos a partir de 2010.

Se da la paradoja de que el único socio que ha cumplido ese requisito ha sido Paraguay, que en las elecciones del próximo día 21 renovará a sus representantes en el Parlasur.

La exigencia se ha prorrogado hasta finales de 2014 e incluye una nueva redistribución de los escaños, denominada "de proporcionalidad atenuada" y que dotará a Brasil de 75 asientos, a Argentina 43 y a Uruguay y Paraguay 18 cada uno.

Según el TSJE paraguayo, más de 300 observadores internacionales han sido acreditados para las elecciones del 21 de abril, entre ellos la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Unión Europea (UE) y la Organización de Estados Americanos (OEA).