París, 5 jul.- PSA Peugeot Citroen afirmó hoy que no tiene intención de cerrar ninguna planta en Francia, país en el que en 2010 produjo 1,4 millones de vehículos e invirtió 800 millones de euros.
Así se lo aseguró al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, el responsable de esa compañía, Philippe Varin, en una entrevista dedicada a la estrategia industrial del grupo en Francia, donde "la dinámica de los nuevo modelos del grupo en las plantas francesas sostienen en plan de producción".
La Presidencia francesa destacó en un comunicado que según Varin Peugeot no solo no contempla cerrar ninguna de sus plantas en el país, sino que analiza la manera de mejorar la competitividad de sus centros galos.
Sarkozy le recordó por su parte "el importante apoyo concedido a PSA durante la crisis, con un préstamo de 3.000 millones de euros y medidas que han permitido sostener con fuerza el mercado automovilístico francés".
La semana pasada, no obstante, el Comité de Fabricantes Franceses de Automóviles (CCFA) indicó que las matriculaciones de automóviles nuevos en Francia cayeron en junio un 12,6 por ciento con respecto al mismo mes de 2010, hasta sumar 210.236 vehículos vendidos.
En concreto, las marcas francesas registraron una bajada del 17,9 % con 115.909 coches matriculados, si bien Peugeot y Citroën solo perdieron respectivamente un 9,1 % y un 7,2 % frente al desplome de Renault, que cerró el mes con un 25,9 % menos que el mismo mes del año anterior.
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