Vigo, 29 jun.- El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha imputado al responsable de una granja en Nigrán por la comisión de sendos delitos contra la salud pública y falsedad documental, al alimentar supuestamente al ganado con piensos de origen animal, informó el instituto armado.
Las imputaciones se derivan de la detección de que el ganado estaba siendo alimentado, supuestamente, con pienso elaborado a base de harinas de frituras con restos de animales, una práctica prohibida a raíz de la problemática de la enfermedad espongiforme bovina, también conocida como "mal de las vacas locas".
Los servicios oficiales de Sanidad Animal de la Xunta han dispuesto la inmediata clausura de las instalaciones y la intervención cautelar de 2.000 kilos de pienso que se localizaron en el interior de la granja, así como la inmovilización de la totalidad de los animales: 109 ovejas y 11 vacas.
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