París, 3 abr.- El grupo automovilístico francés PSA Peugeot Citroen, en pleno proceso de reajuste para salir de los números rojos, ha vendido por 245,5 millones de euros su sede central en un punto muy prestigioso de París, donde va a continuar en régimen de alquiler.
PSA indicó en un comunicado que la promesa de venta se formalizó ayer con el grupo inmobiliario Invahoé Cambridge, filial de la sociedad canadiense financiera Caisse de Dépôt et Placement du Québec.
La compañía automovilística señaló que junto a la cesión ha suscrito un contrato de alquiler por nueve años renovables para su sede, ubicada en la avenida de la Grande Armée, a unos cientos de metros del Arco de Triunfo y a una distancia similar del Palacio de Congresos de la capital francesa.
No precisó las condiciones del alquiler por los 36.800 metros cuadrados del conjunto de edificios, que disponen de unos grandes escaparates.
La operación se enmarca en el programa de cesiones que había anunciado el pasado mes de febrero cuando presentó los resultados financieros de 2011, cuando sus beneficios bajaron un 48 % hasta 558 millones de euros y, sobre todo, el resultado de su división automovilística fue negativo de 92 millones de euros.
PSA ya se ha desprendido, por 440 millones de euros, de la empresa de alquiler de coches Citer y espera obtener otros 500 millones de otra filial, Gefco, uno de los grandes actores del negocio logístico del automóvil.
El fabricante francés acaba también de ceder en marzo una participación del 7 % de su capital a su nuevo socio, el gigante estadounidense General Motors por un millar de millones de euros.
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