La moneda brasileña había concluido la jornada del lunes con un descenso del 0,69% respecto al viernes, cotizada en 3,919 unidades por billete verde.
En lo que va de año, el real ha perdido el 31,67% de su valor, mientras Brasil atraviesa una fuerte tormenta que conjuga una potente crisis política con la baja popularidad del gobierno y una recesión económica con el alza de la inflación y del desempleo.
Este martes se conoció, además, que Brasil revisó su previsión de cerrar 2015 con un pequeño ahorro fiscal y anunció un déficit primario de 0,9% del PIB tras recortar por cuarta vez la meta en medio de la severa crisis.
Horas antes, un sondeo encargado por la Confederación Nacional de Transporte (CNT) mostró que el gobierno del gigante sudamericano cuenta con una aprobación de apenas 8,8%, mientras que más del 80% de los encuestados considera que la presidenta Dilma Rousseff no sabe lidiar con la actual crisis económica.
En este contexto, el real cruzó la barrera de los 4 por dólar el mes pasado, cuando llegó a hundirse hasta su menor valor desde que entró en circulación en 1994: 4,24 unidades.
En 2014, la moneda del gigante sudamericano cerró con una depreciación del 13%.
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