Urkullu augura "esfuerzos adicionales" y "sufrimiento" para superar la crisis

Zarautz (Gipuzkoa), 31 ago.- El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, se ha comprometido hoy en Zarautz (Gipuzkoa) a "decir la verdad" a los ciudadanos, a los que ha advertido de que su partido, si gana las elecciones, "exigirá esfuerzos adicionales" para superar la crisis porque "nada se podrá conseguir sin sufrimiento".

El candidato a lehendakari ha intervenido hoy en un acto político en Zarautz, con el que todos los años los jeltzales inician el curso político y que ha abierto el presidente del partido en Gipuzkoa, Joseba Egibar, quien ha acusado al Gobierno Vasco socialista de seguir una "estrategia deliberada de empobrecimiento" para que Euskadi "se parezca cada vez más a España".

En una disertación basada casi exclusivamente en la situación económica, Urkullu ha contrapuesto los treinta años de gestión de su partido en las instituciones vascas con los "tres años negros de desgobierno de Patxi López y Basagoiti".

El presidente del PNV ha centrado su discurso en criticar la "nefasta" gestión del PSE-EE al frente del Gobierno Vasco, a la que ha enfrentado la experiencia y el compromiso con "la verdad" de su partido para propiciar "un cambio de rumbo".

"¿Cuál es nuestro compromiso?. Primero lo más importante: decir la verdad. No prometer lo que no vamos a poder cumplir. Decir a la gente que vamos a exigir esfuerzos adicionales. Admitir que nada se podrá conseguir sin sufrimiento", ha afirmado Urkullu, quien ha apostado por "recuperar la disciplina y el rigor presupuestario", así como por "propiciar el crecimiento económico".

Ha insistido en que "todo su esfuerzo" se dirigirá a superar la recesión, para lo que primará la "austeridad y la exigencia en la gestión" y "no habrá endeudamiento para gasto corriente" porque no se puede "gastar lo que no se tiene".

No obstante, ha indicado que el programa del PNV "garantiza los servicios esenciales en Educación, Sanidad y Servicios Sociales": "Avanzaremos más despacio, pero avanzaremos todos", ha apostillado.

Ha definido el pacto entre el PSE-EE y el PP como una relación de "sexo sin amor" en el que "al final no hay amor y lo otro no lo sé", tras lo que ha asegurado que se unieron "para gobernar" sin programa político porque su objetivo era "el poder por el poder" y, "si pueden, se volverán a unir".

El candidato a lehendakari se ha referido también al final de la violencia, que genera ilusión para "abrazar un nuevo futuro, con memoria y dignidad" porque "superar el pasado requiere reconocer el daño causado".

"La izquierda abertzale tiene pendiente mirar de frente a la sociedad vasca. Han vivido 35 años en una burbuja. Tienen que salir de esa burbuja, reconocer el daño causado", ha afirmado Urkullu, quien ha remarcado que la antigua Batasuna "tiene esa deuda pendiente con este pueblo que ha padecido sufrimiento y dolor que ellos han justificado".

El líder nacionalista ha afirmado que en este "nuevo tiempo" llega el momento de la "transición vasca", de buscar un "gran acuerdo constituyente" y caminar hacia un nuevo estatus político para Euskadi.