Viyuela y Seoane invertirán en espectáculos para ayudar a la cultura

Las Palmas de Gran Canaria, 5 oct.- El actor Pepe Viyuela y el veterano productor teatral Juanjo Seoane invertirán su tiempo y dinero en montar espectáculos para compensar el "momento tan difícil" que vive la cultura, por la que el segundo ha dicho estar dispuesto a "luchar con uñas y dientes".

Y es que el trato que se está dando a la cultura en la crisis actual, aplicándole un impuesto al valor añadido del 21 %, "el mismo que a las pieles, al alcohol o incluso al tabaco", han impulsado a Seoane a "pelearse con quien sea", aunque ello hasta le suponga el riesgo de "dar con sus huesos en la cárcel", a pesar de tener ya 73 años, una edad en que podría pensar en jubilarse, ha indicado.

Juanjo Seoane ha hecho estas declaraciones al presentar en rueda de prensa en Las Palmas de Gran Canaria las dos funciones que hoy y mañana se pondrán en escena en el Teatro Cuyás de "Los habitantes de la casa deshabitada" de Enrique Jardiel Poncela, la última producción que ha encabezado, junto al actor protagonista de la misma, el cómico Pepe Viyuela.

El actor ha respaldado la apuesta de Seoane, al que ha definido como "un valiente, un resistente", no solo con su interpretación en el escenario sino incluso coproduciendo el espectáculo.

Viyuela ha explicado que ha decidido arriesgarse y hacerse productor en la difícil coyuntura actual, sobre lo que Seoane le ha advertido de que es "un mal momento" para buscar beneficios invirtiendo en la cultura, por entender que "ahora es cuando hay que salir" y "arrimar el hombro, de alguna manera", por la supervivencia del teatro.

Puesto que, aunque "mucha gente se retira a sus cuarteles de invierno" y hace justo lo contrario que él, su opinión es que "el momento exige eso".

Y, por ello, Pepe Viyuela ha indicado incluso que no solo piensa asumir el papel de productor de forma ocasional en este montaje, sino que "le gustaría que fuera el inicio" de una nueva faceta profesional suya en el mundo del espectáculo.

Todo ello, según ha querido subrayar, desde la convicción de que, aunque entiende que debe actuar así porque "hay que defender la cultura" en el momento actual, "tampoco esto que nos toca va a poder con el teatro".

Porque el teatro desaparecerá solo cuando "no exista nadie sobre la tierra", al suponer una forma que tiene el ser humano de dar cauce a su necesidad de relacionarse con los demás contándose unos a otros historias que les muevan a pensar y sentir emociones, ha argumentado.