Zapatero, optimista para 2010, pide temple y responsabilidad ante la crisis

Madrid.- El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha mostrado hoy optimista, convencido de que en 2010 el país iniciará la recuperación económica, ha pedido "temple" y "responsabilidad" para salir de la grave crisis y ha instado a todas las fuerzas políticas a defender a España y a los españoles.

En su discurso ante los diputados y senadores socialistas que se han reunido en la Cámara Alta para iniciar el curso parlamentario, Zapatero ha defendido las reformas del mercado laboral y del sistema de pensiones y ha anunciado que prorrogará seis meses la prestación que reciben los desempleados que ya no cobran paro.

"Soy optimista no porque ignore las dificultades que tenemos, sino porque tenemos confianza en el país, en sus ciudadanos, en su capacidad de esfuerzo y compromiso", ha recalcado antes de insistir en la "solvencia" de la economía española.

Acompañado de sus dos vicepresidentas, María Teresa Fernández de la Vega y Elena Salgado, Zapatero ha hecho referencia a la "preocupación" que ha causado en los mercados determinados "movimientos especulativos" y, según ha señalado en los pasillos, "no será la primera vez ni será la última".

Ha restado así importancia a la fuerte caída de la Bolsa la semana pasada, al considerar que es normal que haya un "reajuste" tras el ejercicio pasado, cuando los beneficios fueron superiores a los de países como Francia, Reino Unido o Estados Unidos.

Por ello ha pedido "perspectiva" y, a pesar de reconocer la gravedad de la crisis, ha hecho hincapié en las fortalezas de la economía, cuyo riqueza ha aumentado un 13 por ciento desde 2003 y tiene la mayor protección a los parados y una deuda en relación con el PIB veinte puntos por debajo de la media europea, a pesar de que el déficit es el más alto de la historia.

Zapatero, quien ha apelado al esfuerzo colectivo y se ha mostrado "plenamente convencido" de que la recuperación económica será "sólida", ha pedido responsabilidad a las comunidades autónomas y ayuntamientos para reducir el déficit y ha ofrecido "el máximo diálogo" a las fuerzas políticas, empresarios y sindicatos para sacar adelante las reformas necesarias.

En este contexto, ha instado a todos los responsables políticos, sin citar expresamente al PP, a actuar con seriedad, mirando al interés general y no al corto plazo por intereses partidistas.

Ha defendido así la propuesta de reforma laboral presentada por el Gobierno a los agentes sociales, un documento que no es "blando ni duro", sino "pacífico" y pensado "para el diálogo" y para mantener la paz social.

Ha hecho asimismo hincapié en la necesidad de reformar el sistema de pensiones a través de un debate "sereno y racional" que concluya con un "gran consenso nacional", pensando en el interés del país y en las prestaciones que recibirán "los hijos de los trabajadores" en 2025 ó 2030.

La propuesta, ha subrayado, no es para esta etapa porque no obedece ni a la urgencia ni a intereses electorales.

A su juicio, pensando en el futuro, hay que dar ahora respuesta al progresivo envejecimiento de la población, algo que se hará, ha garantizado, sin incrementar las cotizaciones sociales, "con medidas razonables, sensatas y progresivas".

Según Zapatero, España se encuentra ahora "en el tránsito desde la recesión a la recuperación económica" y es ahora cuando las reformas van a surtir más efecto.

El Gobierno, ha añadido, nunca ha eludido su responsabilidad.

Tras recordar el "riguroso" plan de austeridad diseñado por el Ejecutivo, ha considerado que es "imprescindible" que se sumen todas las administraciones porque el gasto público está descentralizado y ha garantizado que el Gobierno tiene "ideas claras" sobre lo que va a recortar y lo que no.

No se reducirán ni las prestaciones sociales, ni el esfuerzo en investigación y desarrollo ni la ayuda oficial al desarrollo.

La crisis, ha recalcado, obligará a "serios esfuerzos y sacrificios", pero se intentará que aquellos con más dificultades sean los que menos sacrificios realicen para mantener la cohesión social.

En este contexto ha anunciado que el viernes el Consejo de Ministros prorrogará seis meses más la prestación extraordinaria de 426 euros para los parados que ya no reciben prestación por desempleo.

Esta ayuda ha beneficiado hasta ahora a 300.000 personas y el Gobierno calcula que la recibirán 200.000 parados más, "un esfuerzo social que merece la pena", según el líder de los socialistas.

"Estoy convencido de que vamos a ganar la recuperación económica con las iniciativas y reformas en marcha, preservando la cohesión social, la paz social, multiplicando las posibilidades de innovación y crecimiento, modificando aquellas reglas que han perjudicado seriamente la estabilidad económica", ha manifestado.