Abanca logra en 2023 un beneficio histórico para el banco de 711 millones, que supone disparar más de un 220% las ganancias contabilizadas al término de 2022, cuando esta cifra fue de 217 millones. La entidad ha obtenido este resultado en un ejercicio condicionado por la subida de los tipos de interés y en el que ha culminado la adquisición de TargoBank, que se ha permitido ampliar su presencia en Islas Baleares, Andalucía y Levante, así como por la compra de Eurobic en Portugal. Con todo esto eleva su volumen de negocio por encima de los 124.000 millones.
Según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la entidad presidida por Juan Carlos Escotet, ha logrado una rentabilidad sobre recursos propios del 16% gracias al dinamismo del negocio 'retail' y supera sus objetivos estratégicos en rentabilidad recurrente, nivel de capitalización, volumen de negocio y calidad del riesgo. En este contexto, han puesto en valor el aumento de los recursos de clientes por encima de los 6.262 millones al tiempo que la captación orgánica de nuevos clientes ha ascendido a 130.000 usuarios más.
La entidad destaca el crecimiento del margen de intereses en todos los trimestres hasta los 1.232 millones, un 61% más, en línea con el margen bruto, que se coloca en los 1.572 millones (41,7%). El tirón de la demanda crediticia ha impulsado el crédito a familias y empresas repuntando un 14%, mientras en Portugal el incremento has sido superior al 15%. En conjunto, la financiación concedida es de 9.700 millones. La ratio de morosidad sube en tres décimas durante 2023 cerrando el ejercicio en el 2,4% y la cobertura de dudosos roza el 74%.
En rueda de prensa, Escotet ha aseverado que estas cifras explican la "resiliencia de la economía", al que se suman factores como la fortaleza del mercado laboral, la contención de la inflación y un crecimiento del PIB por encima de lo esperado. En este sentido, ha asegurado que su objetivo para 2024 pasa por batir los resultados después de conseguir batir récords. "Estamos enfocados en el crecimiento orgánico, que será clave para nuestro desarrollo, al igual que la captación de nuevos clientes", ha subrayado el Consejero Delegado de la entidad gallega, Francisco Botas.
Abanca ha hecho énfasis en su contribución en más de 400 millones a las Arcas Públicas, aunque no ha querido especificar cuánto deberá abonar en concepto del impuesto extraordinario. No obstante, sí que ha aprovechado la intervención para cargar contra esta tasa que, a su juicio, resta competitividad. Lo ha dicho tres semanas después de reunirse con el nuevo ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, encuentro en el que planteó "todo tipo de temas que afectan al sector". Tal y como publicó este medio, uno de los puntos recurrentes en la ronda de contactos con los primeros espadas de la banca fue el carácter "discriminatorio" de este gravamen.
Abiertos a nuevas adquisiciones
Una vez culminado el proceso de compra de TargoBank, prevén completar su integración a mediados de junio, fecha para la que esperan también contar con el visto bueno de los reguladores para cerrar la transacción de Eurobic. Tras reforzar su "rentabilidad estructural" y posicionarse como séptima entidad tanto en España como en Portugal, no descartan nuevas operaciones, aunque admiten que las "oportunidades cada vez son menores".
"Seguiremos atentos a las oportunidades que puedan surgir en el mercado, pero empiezan a ser menores, porque hay menos apetito por vender", ha enfatizado el banquero venezolano. Sobre sus participaciones en el Deportivo de La Coruña y Nueva Pescanova, Abanca ha negado que el Banco Central Europeo (BCE) haya fijado ningún calendario de desinversión y asevera que se tomarán su tiempo antes de desprenderse de estas acciones. "No tenemos ninguna prisa", han apostillado. Tal y como reiteró hace unos meses, su objetivo en pasa por fortalecer el proyecto empresarial de la firma una vez descartada la búsqueda de un socio industrial.
Por último, respecto a los planes de salida a Bolsa, siguen abiertos a esta posibilidad, que forma parte de sus objetivos estratégicos, aunque el plan está aparcado en el corto plazo. "No hay incentivos para salir al mercado mientras las cotizaciones del sector estén por debajo de su valor en libros, algo que resulta llamativo a pesar de que las rentabilidades superan el coste de capital", ha subrayado, para remarcar que "cuando las condiciones cambien" explorarán esta opción.
