CaixaBank espanta a los inversores tras pronosticar un año negro para la banca

  • Las previsiones para 2019 del banco que dirige Gonzalo Gortázar se sitúan por debajo de las expectativas de los analistas. 
CaixaBank plantea un ERE para 2.157 empleados
CaixaBank plantea un ERE para 2.157 empleados
Europa Press

Caixabank presentó ayer un beneficio neto de 1.985 millones de euros, el mejor resultado de su historia, pero cerró la sesión de este viernes con un descalabro bursátil del 7,27%, superior a los que registró en los días posteriores a la celebración del referéndum independentista del 1-O y el más acusado desde la consulta del Brexit. ¿Por qué?

Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank y con una trayectoria de 16 años en la banca de inversión, aseguró en la rueda de prensa, entre risas, que tampoco acababa de entenderlo cuando le preguntaron al respecto, pero lo explicó perfectamente después. A pesar de que el año había sido muy bueno para la entidad, “todo el mercado” sabía desde hacía meses su trayectoria positiva.

“Es posible que nuestra visión de un entorno de dificultad para los próximos doce meses tenga algo que ver con la reacción del mercado”, argumentó el banquero madrileño, que pronosticó un escenario muy crudo para la banca en 2019. “Estamos haciendo un ejercicio de responsabilidad y hay que decir que la situación actual todavía es complicada, que hay una fuerte inercia de crecimiento de gastos, que los volúmenes todavía crecen muy moderadamente y que los tipos de interés no suben. Para lo que es el negocio bancario del día a día estamos en una situación difícil”, esgrimió Gortázar.

Y es que a pesar de hacerse el sorprendido en un inicio, el consejero delegado de CaixaBank tenía claro cuál era el diagnóstico de la caída bursátil. Si los resultados del cuarto trimestre fueron un 35% menores a las expectativas del mercado -principalmente por un cargo de 154 millones de euros en BFA, la filial en Angola del banco- las previsiones de cara al vigente ejercicio que ofreció CaixaBank fueron mucho peores de lo esperado, pese a que el banco acaba de presentar su plan estratégico, que mantiene intacto.

“El mensaje sobre los costes no ha cambiado, pero la previsión para 2019 (+5%) nos cogió, a nosotros y al mercado, por sorpresa”, comentó al respecto Andrea Unzueta, analista de Credit Suisse, que incide también en que la entidad se expone a un riesgo de 7.000 millones por el IRPH, índice sobre el que se pronunciará próximamente la Justicia europea.

Capacidad de generar ingresos

Algunos analistas incluso dudan de la capacidad de CaixaBank para generar ingresos recurrentes en el futuro. “Las previsiones decepcionantes plantean dudas sobre la capacidad de CaixaBank para elevar los ingresos en un mercado competitivo y controlar los costes en un entorno muy sindicalizado con la presión que ejercen la regulación y la tecnología”, expone Stefan Nedialkov, analista de Citi, mientras que desde JP Morgan Cazenove, cuyas previsiones para 2019 tampoco se han visto correspondidas, consideran que la proyecciones que realiza la entidad para el vigente ejercicio son “débiles”.

Desde SECB, el sindicato mayoritario en CaixaBank, no obstante, consideran que las palabras de Gortázar respecto al entorno difícil que encarará el sector en 2019 solo buscan justificar el ERE que están negociando actualmente con el banco, que podría saldar con la salida de más de 2.000 empleados, en torno al 7% de la plantilla. En este sentido, Unzueta recuerda que estos cargos de reestructuración “nublan” las perspectivas.

Sea como fuere, los resultados correspondientes al ejercicio 2018 permiten al banco que preside Jordi Gual mantener su liderazgo en territorio nacional, principalmente gracias a los ingresos obtenidos por su negocio asegurador. La entidad de origen catalán puede atribuir a España la consecución de 1.723 millones, beneficio que se sitúa muy por delante del que obtienen los dos grandes bancos del país. En España, BBVA tiene un beneficio de 1.444 millones y Santander de 1.216 millones.

Mostrar comentarios