El fabricante de microchips y equipamiento electrónico Intel perdió 1.277 millones de dólares, lo que supone al cambio actual uno 1.164 millones de euros en el primer semestre, pero volvió a los beneficios entre abril y junio, cuando los resultados que presentó este jueves superaron las expectativas del mercado.
Tras acumular dos trimestres consecutivos en rojo, en el más reciente la empresa estadounidense tuvo un beneficio neto de 1.481 millones de dólares, si bien no le sirve aún para compensar los 2.758 millones que había perdido entre enero y marzo.
En el segundo trimestre, Intel facturó 12.949 millones de dólares, un 15% menos que en el mismo periodo del año anterior, pero un dato mejor de lo previsto por los inversores, lo que hacía que las acciones de la tecnológica subiesen más de un 5% en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de Wall Street, cuando se conoció la noticia.
Según los analistas, la bajada en la facturación del fabricante de microprocesadores se explica sobre todo por la caída que se ha visto en las ventas de ordenadores y otros equipos informáticos después de que las ventas se disparasen durante la pandemia. En este segundo trimestre, en todo caso, lntel facturó más que en el primero y adelantó que espera mejorar las ventas aún más en los próximos meses.
En un comunicado, el consejero delegado, Pat Gelsinger, destacó que la compañía está "bien posicionada para aprovechar el crecimiento significativo" de la inteligencia artificial, cuya explosión ha disparado en los últimos meses las expectativas para buena parte del sector tecnológico. En lo que va de año, las acciones de Intel han ganado más de un 29% en Wall Street, pero están aún muy lejos de sus máximos históricos.
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