La CNMV indaga si Nueva Rumasa colocó pagarés de menos de 50.000 euros

Madrid.- La CNMV indaga si Nueva Rumasa colocó entre más de un centenar de inversores pagarés de menos de 50.000 euros, lo que podría vulnerar la Ley del Mercado de Valores al requerir un folleto que, por ejemplo, informara sobre las garantías para devolver las inversiones.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha remitido una carta a los diferentes despachos de abogados que asesoran a los inversores en la que les insta a numerar e identificar a quienes hubieran suscrito pagarés por un importe inferior a 50.000 euros, cuya documentación también deberá ser enviada al organismo.

En la misiva, el director del Departamento de Mercados Primarios de la CNMV, Carlos Lázaro, recuerda que la Ley del Mercado de Valores obliga a la "verificación y registro previo de un folleto informativo" a quienes pretendan emitir valores con un importe unitario inferior a dicha cantidad, ya que se trata de una oferta pública.

En concreto, el artículo 30 de la Ley del Mercado de Valores establece que no tendrán carácter de oferta pública y, en consecuencia, no deberán publicar un folleto informativo aquellas empresas que emitan valores (como pagarés) con un valor inferior a 50.000 euros, dirigidos a menos de 100 personas o empresas de España.

El artículo también exige que, aunque el valor sea inferior a 50.000 euros, la inversión total tiene que superar esa cantidad, al tiempo que establece que con la operación la empresa no podrá obtener recursos superiores a 2,5 millones de euros en un período de 12 meses.

Los abogados que asesoran a los inversores (Jausas, Martínez-Echevarría o V Abogados) sostienen que algunos de los inversores -mayoritariamente trabajadores del grupo- no llegaron a invertir el mínimo de 50.000 euros requerido.

La infracción del deber de elaborar un folleto informativo para una oferta pública constituye una infracción muy grave de la Ley del Mercado de Valores, lo que se puede castigar con una multa que puede ser bien el quíntuplo del beneficio bruto obtenido, bien el 5 % de los recursos propios de la entidad infractora o el 5 % de los fondos totales utilizados en la infracción, o 600.000 euros.

La CNMV, que no ha abierto una investigación oficialmente sino que está recabando información, ha seguido los pasos de Nueva Rumasa desde que en febrero de 2009 anunció la primera emisión de pagarés a través de Carcesa, en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos).

A Carcesa le siguieron Hibramer, Maspalomas y la sociedad José María Ruiz-Mateos, que tuvo que suspender la emisión por las nuevas exigencias de que la operación contara con un intermediario autorizado.