Son su "apuesta del futuro". Así lo ha definido el consejero delegado de Merlin Properties, Isamel Clemente, en la junta de accionistas que han celebrado este jueves en segunda convocatoria. La socimi ha elevado su apuesta por los centros de datos que está construyendo en Barcelona, Madrid y Barcelona, y asegura que aumenta las previsiones sobre la capacidad de datos en sus instalaciones y espera que para su fase de demostración en 2024 alcanzar 12 megavatios (MW) con una demanda adicional estimada en 15MW.
“Estamos por encima de nuestras previsiones más optimistas”, comenta Clemente. En el caso de Madrid, por ejemplo, comenzaron con un nivel de prealquiler de 4,2MW para los 9 megas que tenían previstos en su instalación. Para conseguir un mayor almacenaje, la socimi está en proceso de firmar diferentes acuerdos: uno de ellos con su socio americano de 2,6MW adicionales; otro con un diferente operador internacional, y por último con un integrador local que van entre los 2 y los 5 megas. “Eso significa que estaremos en una precomercialización de entre 8,8 y 11,8 respecto de los mega que tenemos instalados”, sentencia.
Para su segunda fase que tenían previsto tener 4 centros de datos abiertos y 70MW comercializados para final de 2027, su nueva estimación son 82 megavatios para final de ese mismo año. Ya la fase de desarrollo completo son 236 megas más allá del año 2035. El CEO destaca que actualmente no existen muchos hiperescaladores (la compleja combinación de hardware e instalaciones que pueden escalar un entorno de computación distribuido a miles de servidores. “Si tres de los hiperescaladores firman con nosotros, significa un espaldarazo a nuestras características técnicas y detrás de ellos, vendrán los demás”.
Por otro lado, estos ‘data centers’ tendrán un gran componente sostenible. En 2022 Merlin hizo público su compromiso net zero para reducir el carbono operacional de la empresa; es decir, los que actualmente tienen en su cartera. A parte, se comprometieron a reducir los carbonos en las nuevas infraestructuras, y a bajar las emisiones en alcance 3 (las que producen sus clientes). Para este último punto, la socimi ha tomado como estrategia disminuir la renta para que ellos aporten su compromiso de emisiones cero.
En el caso de los tres centros que lanzará, que tienen un valor de 600 millones de euros, aseguran que serán operadores neutrales con conexión a múltiples proveedores. Además, apostarán por el modelo americano del ‘six nines’, 99,9999% de estimación de disponibilidad de servicio. Contará con una capacidad de recuperación integrada gracias a una microrred que implementarán, y tendrán mayor eficiencia energética- 1,15 PUE (Power Usage Effectiveness)- que es el indicador para medir la eficiencia energética de estos centros. Son 100% de energía renovable, enfriamiento sin agua; sistema de monitorización constantes y densidades de hasta 40KW por módulo.
Realizarán el lanzamiento de estos data center antes de verano, donde los clientes podrán instalar sus equipos y ya para el último trimestre podrían comenzar a prestar servicios y a pagar la renta correspondiente. Específicamente en Bilbao inaugurarán en septiembre, Madrid (Getafe) en octubre y Barcelona entre octubre y noviembre. Merlin se encuentra negociando con el ayuntamiento de Lisboa y está a la espera de la licencia que les dé ‘luz verde’ para poder comenzar a construir el cuarto centro en esta ciudad.
Refinanciados hasta 2025
La empresa liderada por Ismael Clemente ha pagado un bono que vencía este año y gracias a este último movimiento ya no cuenta con nuevos vencimientos hasta mayo de 2025. Este pago se ha financiado con otro préstamo sindicado y de línea de crédito, que en un comienzo fue de tipo variable, pero en la junta de este jueves han anunciado que contrataron una póliza para hacer el cambio a tipo fijo con un coste del 3,8%.
En esta financiación formaron parte diferentes entidades bancarias y financieras. Por ejemplo, para el nuevo ‘term loan’ (préstamo a plazo), aportaron Caixabank, BBVA, Société Générale, BNP Paribas, CA-CIB, Bankinter, Unicaja, Kutxabank y Sabadell. Y para la línea de ahorro que son 700 millones- y se aumentará a 740 millones- participan los mismos y se les suma Intesa San Paolo, SMBC Bank, Natixis, Santander y HSBC.
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