La acumulación de pérdidas de Bricor, ha llevado a El Corte Inglés a plantearse la absorción de su filial de ferretería y decoración. El consejo de administración de este gigante de la distribución, propondrá la operación a la junta de accionistas programada para el 25 de agosto.
Como es tradición, coincidiendo con el último domingo de agosto, la junta valorará la aprobación de la fusión por absorción entre El Corte Inglés y Bricor, de conformidad con el proyecto común depositado en el Registro Mercantil.
En concreto, el gigante de la distribución española ha señalado que con esta fusión "se pretende mejorar y complementar la oferta comercial, al mismo tiempo que se aprovechan las sinergias entre ambos formatos, tanto en el área de compras como en el de ventas". De esta forma, la firma confía en que la nueva estructura permitirá también una optimización de la propuesta comercial y de servicios de cara al cliente.
Desde El Corte Inglés han precisado que esta operación no afectará a las plantillas de ninguna de las dos sociedades, y que se mantendrán ambas marcas, cada una con su propia identidad corporativa.
Desestiman la demanda contra la junta de IASA
El juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid ha desestimado la demanda interpuesta por César y María Antonia Álvarez, hermanos del presidente fallecido de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez, en la que solicitaban la impugnación de los acuerdos adoptados en la junta de IASA, la sociedad patrimonial que cuenta con el 22% del capital social de la empresa, que se celebró el 6 de septiembre de 2016.
En concreto, los demandantes pedían al juez que se declarasen nulos la totalidad de los acuerdos adoptados en esa junta y en particular el relativo a la reducción de capital social y modificación de estatutos, además de solicitar la nulidad de la transmisión de activos con que se materializó el acuerdo de la reducción de capital. El juez señala en la sentencia que tanto el tío como la madre del que fuera presidente de El Corte Inglés, Dimas Gimeno, tenían un "conocimiento previo" de los acuerdos que se iban a adoptar en la junta de IASA por lo que "no pueden alegar el carácter sorpresivo" de los acuerdos adoptados.
Además, la resolución subraya que ambos han actuado "ejercitando sus correspondientes derechos de voto en distintas juntas, no impugnadas a día de hoy, dando una apariencia de conformidad con esa forma de actuar que, conforme a los principios de buena fe, no puede oponerse hoy a la sociedad para alegar la nulidad de la última junta".
De esta forma, la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, indica que esta conducta de César y María Antonia Álvarez les "priva de legitimidad para poder instar la nulidad de la junta y consecuentemente de los acuerdos adoptados" en la misma. El juez ha negado que en la administración de la sociedad Cartera de Valores IASA se produjera algún tipo de perjuicio o irregularidad. De esta forma, al haber desestimado la totalidad de las pretensiones de los demandantes, el juzgado les ha condenado además al pago de las costas.
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