22-m. Rajoy revisa la estrategia de campaña con el gurú pedro arriola

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha revisado en las últimas horas la estrategia de campaña para las elecciones autonómicas y municipales del 22 de mayo con el sociólogo Pedro Arriola, quien le acompaña en algunos mítines.
Rajoy y Arriola hicieron juntos el miércoles el viaje a Oviedo, donde el líder del PP participó en un gran mitin celebrado ante más de 2.500 personas en el nuevo Palacio de Congresos y Exposiciones para arropar a su candidata a la Presidencia del Principado de Asturias, Isabel Pérez Espinosa.
Según confirmaron a Servimedia fuentes de la dirección nacional. Rajoy y Arriola aprovecharon para hacer un análisis de la primera semana de campaña electoral y revisar la estrategia que está siguiendo el presidente del PP a la hora de responder a los ataques dialécticos del PSOE.
El balance que hace el PP es que la campaña electoral está transcurriendo dentro de los parámetros iniciales. Se mantiene la previsión de repetir victoria en todas las comunidades autónomas y capitales de provincia donde ya gobierna y espera arrebatar algunos feudos históricos al PSOE.
Oficialmente, no se reconoce ninguna necesidad de cambiar de estrategia y se asegura que todo transcurre correctamente. También se resta importancia a la presencia de Arriola en los mítines de campaña, a pesar de que sus apariciones públicas son contadísimas.
CENTRADO EN LA ECONOMÍA
Lo cierto es que, hasta ahora, Rajoy lleva toda una semana, desde que inició la pegada de carteles el pasado jueves en Sevilla, con un discurso centrado en exclusiva en el ámbito económico, en los efectos de la crisis y en los casi cinco millones de parados que existen en España.
En varias ocasiones ha afirmado que no se piensa “distraer” de este objetivo y deja la tarea de replicar a los ataques socialistas a segundas filas, como el vicesecretario general de Comunicación del PP, Esteban González Pons.
Rajoy ha acusado también al PSOE de hacer “mucho ruido” para evitar que se hable de paro y economía en la campaña electoral. El martes, por ejemplo, sentenció en Galicia que no pensaba entrar a responder a los ataques que le lanzan sus adversarios. “Que no cuenten conmigo”, dijo.
La única vez que Rajoy se ha salido del discurso económico fue cuando el Tribunal Constitucional admitió que la coalición abertzale Bildu se presentara a las elecciones municipales de la Comunidad Vasca y Navarra.
El presidente del PP hizo una breve comparecencia, sin admitir preguntas de los periodistas, en Jerez de los Caballeros (Badajoz) para acatar la sentencia de los magistrados pero exigir al Gobierno que siguiera empleando los mecanismos legales que permite la Loreg para anular las candidaturas antes del 22-M.
RESPONDER A LOS SOCIALISTAS
Desde aquella valoración el 6 de mayo, Rajoy ha pasado siete días sin volver a hablar del terrorismo ni de ninguno otro asunto que no sea la economía. No obstante, su mensaje se ha endurecido ligeramente a la hora de criticar la gestión de Zapatero al frente de la economía.
La aparición del sociólogo Pedro Arriola ha coincidido con unos discursos más preparados y con frases más contundentes a la hora cuestionar al Ejecutivo socialista, al que en Oviedo definió como el más antisocial de la historia de la democracia por los recortes aprobados hace exactamente un año.
Bajo la atenta mirada de Arriola, sentado en primera fila del Palacio de Congresos de Oviedo, Rajoy acusó a Zapatero de querer recuperar “en dos tardes” el prestigio y la confianza que ha perdido durante siete años en La Moncloa.
Puso de manifiesto que los conocimientos económicos que el exministro Jordi Sevilla le prometió aprender también “en dos tardes” no sirvieron de nada a la vista del balance económico que ofrece el PSOE y, sobre todo, del fuerte incremento del número de parados en esta legislatura.
En los últimos días, Rajoy ha intensificado sus críticas al PSOE. Sólo habla de economía, igual que los primeros días de campaña electoral, pero sus declaraciones son más contundentes y con ellas entra a responder a las acusaciones del presidente del Gobierno o de sus ministros.