Valladolid, 24 oct.- El mundo de los adultos visto desde el prisma de los niños ha capitalizado hoy las proyecciones a concurso dentro de la 59 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), que mañana fallará y entregar sus galardones en las diferentes sesiones competitivas.
Los directores británicos Guy Jenkin y Andy Hamilton han presentado ante el jurado internacional "What We did in our Holiday", una comedia ácida, amarga, reconocible con la etiqueta de humor inglés y que sostienen tres niños muy pequeños, hijos de un matrimonio al borde del divorcio y de un precipicio existencial.
El tándem compuesto por Jenkin y Hamilton invierte los papeles en el filme: dibuja a los pequeños como seres adultos y a los mayores, con sus disputas conyugales y familiares, los presenta como seres inmaduros, incapaces de asumir responsabilidades ante sus hijos sin que a todos les afecte de forma negativa.
"La cuestión que planteamos al hacer la película no era la posibilidad de llegar a un final feliz, el hecho de volver a reunir a un matrimonio en quiebra, sino la de afrontar una separación de un modo adulto o maduro", ha explicado Guy Jenkin en una rueda de prensa ante los medios informativos.
Con ese deliberado propósito, ha añadido Hamilton, "pusimos a los niños como adultos y a los padres más infantiles".
Más de 35 años llevan trabajando juntos este dúo, pese a lo cual el primero ha debutado como director de un largometraje con este "What We did on Our Holiday", un viaje a Escocia de un matrimonio y sus tres hijos para asistir a una fiesta familiar en torno al septuagésimo quinto cumpleaños del abuelo.
Pero también es un trayecto al interior de las personas, cuyas contradicciones desnudan y ponen en evidencia los niños en esta comedia de regusto amargo y poblada de diálogos ágiles, humorísticos y contundentes, propios de guiones televisivos en los que han destacado estos dos realizadores londinenses.
El cine estadounidense ha concursado también en esta 59 Seminci con "Little Feet", una inmersión en el universo infantil, "poesía pura", en palabras de su director, Alexandre Rockwell, que ha rodado en blanco y negro salvo una secuencia final, y en la que ha dirigido a sus hijos, Lana y Nico Rockwell.
"Para mí, el reto era el de introducirme con la cámara en el mundo de la poesía infantil", en el universo de los niños, ha explicado ante los medios informativos Alexandre Rockwell, profesor de Dirección de Cine en la Universidad de Nueva York y uno de los realizadores más prestigiosos del cine independiente en su país.
Una hora de duración tiene "Little feet", el viaje de tres pequeños de Los Ángeles en busca del mar o de un río donde depositar un pez al que se le ha muerto un compañero de cautiverio.
El cine "es muy caro en la actualidad, así que oculté mi cámara en el carrito de un bebé", ha desvelado el realizador, para no interferir en demasía en el mundo de los sueños infantiles, a través de una película que "no necesita de subtítulos" porque todo el mundo comprende ese lenguaje, "no hacen falta las palabras".
"El gran poder del cine es la intimidad, esa es la magia", ha añadido Rockwell", quien ha defendido la idea de que son las personas y no el dinero "los que hacen las películas".
Fuera de concurso ha competido la cinta española "Rastros de sándalo", la adaptación cinematográfica de la novela homónima de Asha Miro y Anna Soler-Pont, también productora, que ha rodado en menos de un año María Ripoll entre Barcelona y Mumbai (India).
La fusión de culturas, con el trasfondo de un drama humano de final feliz, subyace en esta historia "universal y personal" a un tiempo, que a María Ripoll le ha servido para "descubrir otras historias y culturas que puedan servir a todo el mundo", ha manifestado ante los medios informativos.
Aina Clotet interpreta a Paula Vila, una joven de acomodada posición social, dueña en Barcelona de una vida ordenada y metódica que de repente se ve convulsionada por la visita de una mujer hindú que le informa de que es su hermana, y de que fue adoptada después de salvar la vida en su India natal por una congregación religiosa cuando era muy pequeña.
La 59 Seminci entregará esta tarde una Espiga de Oro honorífica a la bodega Vega Sicilia, radicada en Valladolid, con motivo del 150 aniversario de esta firma vinícola que ha motivado, este año como novedad, la inclusión de un ciclo dedicado al cine y el vino.
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