Según el relato de los hechos que han reconocido la defensa, la Fiscalía y la Abogacía del Estado, el trabajador Fernando L. se aprovechó de su puesto para quedase con el dinero correspondiente a parte del franqueo de envíos y recogidas en 14 facturas de varios clientes, entre el 2 de diciembre de 2010 y el 21 de diciembre de 2011.
Su 'modus operandi' consistía en introducir en el sistema informático un precio de facturación inferior al real mientras que en la factura entregada al cliente hacía constar el precio correcto, que no se incorporaba a la contabilidad real de la oficina.
La Audiencia condena a Fernando L. por los delitos continuados de falsedad en documento mercantil y de malversación de caudales públicos, y ha tenido en cuenta los atenuantes de reparación del daño y de dilaciones indebidas.
El trabajador, de 58 años y vecino de Badalona, ya ha devuelto el dinero y también ha sido condenado a una inhabilitación especial para ocupar cargos públicos durante un año y cuatro meses.
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