Cruz Roja Madrid atendió a más de 1.000 refugiados

Esta fecha invita a la reflexión sobre la realidad de más de 1.219.059 migrantes que han llegado a Europa en este año, principalmente a través de Grecia e Italia.

"Somos conscientes del drama que se está viviendo en Europa, pero no debemos olvidar que a diario se atienden a solicitantes de protección internacional en nuestros dispositivos y oficinas, quienes proceden de distintos lugares del mundo, y que por desgracia se ven obligados a abandonar su tierra por el temor a perder las libertades, o incluso la propia vida", ha señalado José Zamora, coordinador del Proyecto Refugiados Comunidad de Madrid.

En Madrid, Cruz Roja realiza una intervención social destinada a refugiados con el objetivo de acompañar en el proceso de asilo, cubriendo cada una de las fases de trabajo, desde el asesoramiento previo a la primera acogida, la acogida temporal en centros, o el apoyo en las fases de autonomía.

Desde inicios de 2016, la institución ha atendido a más de 1.000 personas solicitantes de protección internacional y refugiadas procedentes de Ucrania, Afganistán, Irak, Eritrea, Palestina, Venezuela, Apátrida Saharaui, El Salvador, Camerún, Marruecos, Sudán, Honduras, Turquía y República del Congo.

Entre las distintas intervenciones que realiza la institución, Cruz Roja Comunidad de Madrid tiene especial presencia en la primera fase del proceso de acogida del refugiado, siendo la única organización que cuenta con una unidad de recibimiento en el aeropuerto de Barajas.

En la segunda etapa del proyecto se realiza la dotación económica y el asilo en los dos Centros de Acogida al Refugiado (CAR) que ofrece la institución en la comunidad madrileña.

Por último, se procede a la fase de autonomía completa del migrante en la que a través de acciones como el desarrollo de programas psicológicos, jurídicos y de empleo se pretende conseguir la absoluta integración del beneficiario en la sociedad.

Para llevar a cabo esta labor, la organización cuenta con un equipo de trabajo multidisciplinar compuesto por trabajadores sociales, mediadores, abogado, psicólogo y personal administrativo que, apoyados por una treintena de voluntarios, cubren distintos puntos de atención.

"El desarrollo de la autonomía personal del refugiado es un aspecto fundamental para nosotros. Por este motivo, además de la cobertura de las necesidades básicas (alojamiento, manutención, vestuario, farmacia, atención psicológica) trabajamos en distintos programas de empleo para fomentar la igualdad de oportunidades, mediante acciones formativas de orientación laboral, acompañamiento en la búsqueda y mantenimiento ", ha añadido el coordinador del proyecto.