La llamada Operación Quejeta se ha desarrollado por el Grupo de Investigación de la Guardia Civil de La Algaba, que llevaba varios meses investigando una serie de hurtos al descuido cometidos establecimientos y centros comerciales repartidos por la provincia, como San Juan de Aznalfarache, Camas, La Algaba, Alcalá del Río, Guillena, San José de la Rinconada, entre otros, además de provincias limítrofes, según ha informado la Benemérita en un comunicado.
Como consecuencia de sus investigaciones, la Guardia Civil identifica a un grupo de personas vecinas de zonas y barrios marginales de Sevilla que responden a las iniciales de J.M.J., S.A.R., J.B.B. y R.P.S.
Estos podrían estar actuando como una banda u grupo criminal que cometen los delitos de forma perfectamente organizada, con habitualidad y prolongación en el tiempo y siempre con el mismo 'modus operandi'. Finalmente, tras realizar diligencias de reconocimientos fotográficos a testigos de los delitos, éstos han identificado a los sospechosos como autores de los hurtos.
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