Las fuerzas de seguridad brasileñas llevaron a cabo este domingo un ensayo para el traslado de los participantes y personalidades que asistirán a la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos-2016 el 5 de agosto en el legendario estadio Maracaná de Rio.
Varios convoyes con más de 80 vehículos, incluidos helicópteros, participaron en el ensayo, que consistió en "desplazamientos desde diferentes puntos de la ciudad hacia el Maracaná, para luego regresar", dijo Felipe Seixas, delegado federal en la Secretaría Extraordinaria para Grandes Eventos.
Un convoy con dos autobuses entró en la tarde al Maracaná escoltado por motocicletas y coches y dejó las instalaciones deportivas una hora más tarde, constató la AFP.
Seixas señaló que "esto involucrará a muchas personas: entre 11.000 atletas y 10.000 personas de las delegaciones", pero explicó que "no todos los integrantes de la familia olímpica vendrán con escolta, pero sí los atletas y los jefes de Estado y de gobierno".
"Esta es una de las operaciones más complejas de los Juegos Olímpicos. Tenemos todo cronometrado", indicó.
Unos 350 miembros de diversas fuerzas de seguridad participaron en la operación desplegada en los barrios de Barra da Tijuca (centro neurálgico de los Juegos, oeste de Rio), la turística Copacabana, Centro y Maracaná (norte).
Las entidades participantes fueron la Policía Federal, la Ferroviaria y la Militar (PM), fuerzas de seguridad pública, el ejército y la Guardia Municipal, además de los bomberos.
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