Durante su intervención en un desayuno informativo del Fórum Nueva Economía, Mascarell ha repasado la evolución de la sociedad y la política catalana desde la sentencia del Tribunal Constitucional que 'tumbó' parte del Estatut hasta la actual situación, cuando plantea un plazo de 18 meses para la "desconexión" del resto de España.
El delegado de la Generalitat en Madrid considera que a la política española "le faltan razones y le sobran emociones", a la vez que "le faltan ideas y le sobra épica". Y en esta situación, ha lamentado que "abundan las líneas rojas", cuando "la única línea roja debería ser la defensa de la democracia".
Por ello, ha reclamado que el próximo Gobierno central no tenga líneas rojas y, a la vez, ha defendido que el referéndum es la salida "lógica y natural" a la actual situación. "Es hoy por hoy el principal instrumento para poder encontrar el modo correcto", ha insistido.
BAJA CALIDAD DEL ESTADO
Mascarell se ha comprometido a poner "lo mejor" de sí mismo para intentar "desenredar" este "nudo" generado, a su juicio, principalmente por la "baja calidad" del Estado, que "no está sirviendo bien a sus ciudadanos" y "su derecho a vivir mejor".
Esto incide en la sociedad catalana, sobre la que la sentencia del Estatut tuvo "un efecto devastador" y provocó "un cisma político y emocional". "Lo que había empezado como una propuesta reformista se convirtió en un movimiento reformador que apuesta por un Estado propio", ha argumentado Mascarell, que se define como un federalista que ahora votaría a favor de la independencia de Cataluña.
Según ha argumentado, la mayoría de los catalanes están "convencidos" de que podrían "vivir mejor" su tuvieran a su disposición un sistema institucional "más adecuado"; después de haberse "perdido mucho" por no haber hecho una política "valiente y en positivo".
"SIEMPRE VALE LA PENA HABLAR"
El delegado de la Generalitat en Madrid ha calificado además de positivo que el presidente catalán, Carles Puigdemont, y el jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, vayan a tener un encuentro porque considera que "siempre vale la pena dialogar" y "conocer las razones de los demás".
Además, ha aprovechado para negar que se esté produciendo una deslocalización de empresas como consecuencia del proceso independentista y ha recordado el informe que señala a Cataluña como la cuarta región europea que más inversión extranjera captó en 2015.
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