Hallada una tarjeta SIM en la celda de un presunto yihadista en Francia

Guardias de vigilancia encontraron una tarjeta telefónica SIM en la celda de un presunto yihadista, detenido en abril de 2015 en París cuando estaba planeando un atentado contra una iglesia, informaron este sábado fuentes concordantes.

El pasado 20 de noviembre, una semana después de los atentados de París, los guardias de vigilancia de la prisión de Fresnes, en las afueras de la capital francesa, encontraron una tarjeta telefónica para teléfono móvil, durante un "registro específico", según la administración penitenciaria.

La celda registrada era la de Sid Ahmed Ghlam, estudiante francoargelino que, según los investigadores, planeaba atacar una iglesia en Villejuif, en la periferia de París, tres meses después de los atentados contra el semanario satírico Charlie Hebdo y un supermercado kósher. También está siendo procesado por el asesinato de una mujer.

Tras haber descubierto la tarjeta, el 20 de noviembre se inició una investigación por "ocultación de introducción ilícita de objetos en un establecimiento penitenciario", precisó una fuente judicial.

Según el diario francés Le Figaro, que reveló la información este sábado, Sid Ahdmed Ghlam estaba en régimen de aislamiento, algo que desmintió la administración. El detenido fue transferido "unos meses después" a la cárcel de Beauvais (al norte de París).

El diario afirma que la tarjeta contenía "cientos de informaciones", "documentos con organigramas" y datos sobre "individuos que partieron hacia Siria, así como varios nombres de implicados en los atentados del 13 de noviembre".

Según la publicación, el sospechoso habría "intercambiado miles de conversaciones" que se habrían interrumpido el 13 de noviembre.

"Nada permite afirmar que nuestro cliente haya podido hablar por teléfono regularmente en su celda, mientras estaba siendo objeto de una intensa vigilancia", afirmó por su parte a la AFP Matthieu de Vallois, abogado de Sid Ahmed Ghlam.

Según la cadena de televisión TF1, los servicios franceses vigilaban la línea del joven islamista radical en el marco de otro caso, mientras que a la administración penitenciaria "se le pidió que participara en el juego", algo que esa institución desmintió a la AFP.

La noticia salió a la luz tres días después de que Salah Abdeslam, único superviviente de los comandos del 13 noviembre en París, fuera transferido desde Bélgica a la prisión de Fleury-Mérogis, cerca de París, a una celda equipada con cámaras, algo inédito hasta la fecha.

Mostrar comentarios