El actor de 54 años parece tratar de mantener la calma en medio de las acusaciones vertidas por la madre y el ex marido de Cathriona White tras publicarse el contenido de varias cartas de suicidio de la joven en las que le señala a él como responsable de sus "pensamientos suicidas".
El abogado de la estrella de Hollywood, Marty Singer - el mismo que ha llevado casos judiciales del siempre polémico Charlie Sheen -, salía en defensa de su cliente el pasado martes. "Es comprensible que una madre que ha perdido a una hija busque a un culpable", dijo el letrado a US Weekly. "Pero, dirigir de su dolor y rabia hacia Jim Carrey... en un intento de sacar provecho del suicidio de Cathriona, la señora Sweetman se encamina por el mismo camino oscuro tomado por Mark Burton", añadió, para subrayar el flaco favor que las demandas judiciales hacen a la memoria de la fallecida.
También se ha sabido que la progenitora de la joven recibió amenazas de muerte al insinuarse la mala relación con su hija, uno de los motivos que habrían llevado a Cat a quitarse la vida en septiembre de 2015. Sin embargo, la británica presentó documentos en los que se asegura que el intérprete contagió de dos tipos de herpes, clamidia y hepatitis a su hija. Bridig asegura tener en su poder los resultados de sangre positivos de Carrey, que fueron adjuntados a la demanda presentada ante los juzgados estadounidenses. Unas acusaciones que el protagonista de La máscara desmiente categóricamente.
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