En su comunicado, ha afirmado que los milicianos han muerto en operaciones llevadas a cabo en Uruzgán --donde se han registrado la mayoría de las muertes--, Balj, Nangarhar, Ghazni, Baghlan y Kunduz.
Por otra parte, ha indicado que la muerte de los diez soldados eleva a 36 el número de militares que han perdido la vida en lo que va de semana, según ha informado la agencia afgana de noticias Jaama Press.
Los enfrentamientos han tenido lugar en un momento en el que el Gobierno insiste a los talibán para que participen en un proceso de conversaciones de paz, algo que fue rechazado la semana pasada por los insurgentes.
El último intento por la paz, que tuvo lugar el año pasado, acabó en el dique seco después de que los talibán reconocieran la muerte de su líder, el mulá Omar, que ha arrastrado a los insurgentes a la división sectaria.
El Gobierno de Kabul, en este sentido, aborda desde el pragmatismo unas nuevas conversaciones cuyo objetivo primordial es el de estudiar si las líneas maestras del plan de paz permanecen vigentes.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios