Obama propone al juez Merrick Garland como candidato al Tribunal Supremo

EUROPA PRESS

Garland, de 63 años, dirige actualmente el Tribunal de Apelaciones del Distrito de Columbia. A pesar de que llegó a trabajar en el Departamento de Justicia bajo la Presidencia de Bill Clinton, sus posiciones moderadas le han granjeado apoyos tanto entre demócratas como entre republicanos.

Fuentes de la Casa Blanca han defendido en declaraciones a Reuters la "reputación" de Garland y han recordado que un senador republicano, Orrin Hatch, llegó a describirlo como "nominado de consenso". "No es una decisión que haya tomado a la ligera", ha explicado Obama en una comparecencia en la Casa Blanca.

Obama, escoltado por Garland y el vicepresidente, Joe Biden, ha descrito a su candidato como un jurista "razonable e imparcial" y ha explicado que sus sentencias a lo largo de estos años avalan "su dedicación para proteger los derechos de todos los estadounidenses".

"Encontrar a alguien con esta larga carrera de servicio público marcada por asuntos complejos y sensibles, encontrar a alguien a quien todo el mundo respeta y aprecia, eso es raro", ha destacado el mandatario en su exposición.

Garland, por su parte, ha agradecido a Obama que le brinde "el mayor honor" de su vida: "No podría ofrecer un servicio público mayor que sirviendo como miembro del Tribunal Supremo de Estados Unidos".

El presidente no ha perdido el tiempo en materia burocrática y su oficina ya ha confirmado el envío de la propuesta al Senado, primer trámite de una carrera de obstáculos que se avecina complicada para los intereses de la Casa Blanca.

RECHAZO REPUBLICANO

El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, ha avanzando que los republicanos no apoyarán la candidatura de Garland para el Supremo al considerar que el nuevo magistrado debe ser designado por el próximo presidente del país.

Ryan ha expresado su "total apoyo" a la decisión del líder de los republicanos en la Cámara de Representantes, Mitch McConell, y del jefe del comité de designaciones del Senado, Chuck Grassley, de "no seguir adelante con el proceso de confirmación". Ha recordado que, "bajo la Constitución, el presidente tiene todo el derecho a hacer su nominación y el Senado tiene todo el derecho a no confirmar a un nominado".

El candidato favorito en las primarias republicanas, Donald Trump, también ha insistido este miércoles en una entrevista con CNN que el nombre del nuevo juez para el Supremo debería ser propuesto por el próximo inquilino de la Casa Blanca.

El nombramiento del sustituto de Antoni Scalia es clave no sólo para el funcionamiento del Alto Tribunal, sino también para inclinar la balanza a favor de uno de los dos bandos, ya que actualmente hay tantos magistrados conservadores como progresistas.

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