El real retrocedió un 1,29% en la semana que siguió a la votación clave del domingo, donde la Cámara de Diputados aprobó el pedido de impeachment a la presidenta Dilma Rousseff, una posibilidad que agrada a los mercados pero ya anticipada por los inversores.
La moneda brasileña concluyó este viernes con una caída del 1,09%, cotizada en 3,572 por dólar, en una jornada marcada por el bajo nivel de operaciones tras el feriado nacional de Tiradentes, así como por la intervención del Banco Central con la compra de dólares en el mercado futuro.
El miércoles, el real había concluido la sesión con un retroceso del 0,11%, cotizado en 3,533 unidades por billete verde.
El mercado de cambio, muy favorable a la salida de la mandataria, ya había anticipado su posible destitución en meses previos, cuando comenzó a estrecharse el cerco de la crisis del gobierno brasileño, por lo que tras la votación crucial del domingo reaccionó sin euforias.
Para el banco Morgan Stanley, la divisa del gigante sudamericano podría seguir retrocediendo.
"Creemos que el real continuará teniendo un desempeño peor entre las monedas emergentes", afirmó la entidad estadounidense en un informe recogido por el diario Valor.
Mientras, el pedido de impeachment contra Rousseff se encuentra a las puertas de ser evaluado por una comisión del Senado.
En 2015, la moneda brasileña perdió 32,6% de su valor ante el dólar, pero este año ya acumula un avance del 10,58% ante la perspectiva de que la mandataria del Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) salga del poder.
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