LA SENTENCIA POR LA MUERTE DE CINCO JÓVENES EN EL MADRID ARENA SE CONOCERÁ EL MARTES

La sentencia del 'caso Madrid Arena' se conocerá el próximo martes, prácticamente cuatro años después de que se celebrara la macrofiesta en la que murieron cinco jóvenes y que tiene como principal imputado al empresario del espectáculo Miguel Ángel Flores.
En el juicio, Flores dejó patente su pesar por lo sucedido y culpó al Ayuntamiento, cuya alcaldesa era entonces Ana Botella, de haberle alquilado un edificio que no reunía las condiciones de seguridad necesarias para asegurar el normal desarrollo a la fiesta.
Sin embargo, durante la vista oral se practicó una prueba que puso en entredicho la defensa del empresario y demostró que la principal causa de la tragedia fue la venta de más entradas de las que permitía el aforo del local. A esa circunstancia hay que añadir el cierre de los vomitorios que permitían una rápida evacuación y la apertura de varias puertas de emergencias que franquearon la entrada directa a pista de centenares de jóvenes sin control.
La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Madrid notificará a todas las partes incursas en el procedimiento la sentencia correspondiente al denominado 'caso Madrid Arena', a partir de las 12:00 horas.
Según la fiscal y las acusaciones, la pista debía estar esa noche “a reventar” en el momento del inicio del número de la barca del afamado dj Steve Aoki, un extremo que venía en una de las cláusulas del contrato. Pese al riesgo, el espectáculo se celebró y durante su desarrollo se produjeron diversas avalanchas, en las que murieron cinco chicas.
El pasado 12 de enero comenzó el juicio contra 15 acusados por cinco delitos de homicidio por imprudencia grave y lesiones. Flores acusó a la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos (Madridec) como responsable del mal estado del edificio, pero ésta desvió la responsabilidad hacia Kontrol 34, los vigilantes que abandonaron sus puestos de trabajo empujaron a los asistentes, provocando avalanchas.
Por su parte, la empresa Seguriber, que se encargaba de la seguridad interior del recinto acusó a Madridec de abrir un portón por el que se colaron miles de jóvenes.
Además, los responsables médicos del evento, el doctor Simón Viñals y su hijo Carlos, fueron acusados durante el juicio de dar por muertas a dos de las víctimas cuando estaban en parada cardiorrespiratoria.
También estuvo en banquillo el exjefe de la Policía Municipal de Madrid Emilio Monteagudo, que también intentó desviar responsabilidades hacia el jefe del diseño del despliegue policial de esa noche.
HOMICIDIO IMPRUDENTE
Flores afronta una petición fiscal de cuatro años de cárcel por cinco delitos de homicidio imprudente grave y una petición de seis años de inhabilitación para el ejercicio de la profesión de su actividad como empresario u organizador de fiestas. Las acusaciones quieren que se sumen cuatro años por cada víctima.
Sin embargo, la fiscal rebajó sus penas a dos años, seis meses y un día para el que fuera mano derecha de Flores, Santiago Rojo; un empleado de Diviertt, Miguel Ángel Morcillo, y para el jefe del equipo de Seguriber, José Antonio Díaz Romero.
Además, se pidieron tres años de cárcel para el socio y apoderado de Kontrol 34, Carlos Manzanares y Emilio Belliard; el coordinador jefe de Seguriber, Juan José París; el coordinador jefe de Seguriber, Raúl Monterde; y el vigilante de seguridad de Seguriber, Roberto Mateos, entre otros. La misma pena se reclamó para Rafael Pastor y Francisco del Amo, encargados de seguridad de Madridec.
La Fiscalía también rebajó la pena para los encargados del dispositivo sanitario, Simón Viñals y su hijo, hasta quedarse en un año, seis meses y un día de cárcel por "un delito de homicidio por imprudencia grave profesional para cada uno de ellos". Además, la Fiscalía de Madrid retiró la acusación contra el jefe de Emergencias del evento, José Ruiz Ayuso.