Es su segunda visita en menos de cinco meses a Venezuela. José Luis Rodríguez Zapatero ha aterrizado en Caracas para mediar en medio del despliegue militar realizado por Maduro. La primera visita fue el pasado diciembre en calidad de observador para las elecciones.
El titular de Exteriores aclaró entonces que lo hacía en calidad de invitado por el Gobierno venezolano que preside Nicolás Maduro y por las autoridades electorales del país caribeño, por lo que no acudía como observador electoral ni en representación de España.
La llegada de Zapatero coincide con la retirada el pasado 8 de abril del embajador de España en Caracas, Antonio Pérez Hernández, en protesta por los insultos de Maduro al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. Entonces, el presidente de Venezuela había llamado a Rajoy “racista, basura corrupta y basura colonialista por reunirse con opositores y cuestionar la democracia en el país sudamericano.
"Mi deseo es que en Venezuela y en el mundo exista más diálogo, cercanía, comprensión y menos prejuicios", aseguró el expresidente español, en su última visita. Zapatero no llega en un buen momentoLa llegada de Zapatero coincide con un momento bastante complicado en el país. Nicolás Maduro se blinda contra la oposición venezolana. Esa ha sido la respuesta del presidente venezolano, a un posible referendum revocatorio por parte de la oposición. Maduro se arrogó amplias facultades para preservar la seguridad y paliar la escasez de alimentos y medicinas en el marco de un estado de excepción.El decreto, vigente desde el pasado viernes por 60 días y publicado este lunes, faculta al mandatario a dictar las " medidas de orden social, ambiental, económico, político y jurídico que estime convenientes".
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